En el corazón del Valle de los Lobos, cerca de la villa burgalesa de Covarrubias, la Capilla de San Olav vuelve a brillar con una luz que dialoga con el paisaje y la historia. Este templo, considerado la única iglesia de inspiración vikinga de España, cuenta ahora con un nuevo sistema de iluminación desarrollado por la Fundación Iberdrola España junto a la Fundación Princesa Kristina de Noruega

Un enclave con memoria nórdica
La historia de la Capilla de San Olav tiene un origen tan legendario como preciso. En el siglo XIII, la princesa Kristina de Noruega, hija del rey Haakon Haakonsson “el Viejo”, viajó hasta Castilla para contraer matrimonio con el infante Felipe, hermano del rey Alfonso X el Sabio. La unión, concebida como un gesto diplomático entre reinos, tuvo un desenlace trágico: la princesa falleció pocos años después en Sevilla, víctima del calor andaluz, sin descendencia.
El infante prometió construir una ermita en honor a San Olav, patrón de Noruega, devoción que ella había traído consigo desde el norte. Aquella promesa quedó inconclusa durante siglos hasta que, en 2011, la Fundación Princesa Kristina de Noruega, junto con el gobierno noruego y la Junta de Castilla y León, promovieron la construcción de una capilla contemporánea en su memoria.
Realizada en acero laminado y madera, la capilla se alza como un diálogo entre culturas, entre la austeridad escandinava y la calidez castellana. Su diseño evoca la silueta de una iglesia rural noruega reinterpretada en clave contemporánea, perfectamente integrada en el paisaje agreste del valle burgalés.

La luz como continuidad del paisaje
El nuevo proyecto de iluminación, desarrollado por la Fundación Iberdrola España, parte de una premisa clara: integrar la luz en la arquitectura y en el entorno natural, evitando cualquier impacto visual o lumínico que altere la percepción del conjunto. En este sentido, la intervención busca acompañar la experiencia del visitante y subrayar los valores espaciales y simbólicos del edificio.
El acto de inauguración del nuevo sistema de iluminación de la Capilla de San Olav reunió a representantes de las instituciones impulsoras del proyecto. Entre ellos, el presidente de la Fundación Princesa Kristina de Noruega, Manuel Medina, acompañado por varios patronos de la entidad, así como el presidente de la Fundación Iberdrola España, Jaime Alfonsín, y el delegado de Iberdrola en Castilla y León, Miguel Calvo.
Durante el encuentro, Manuel Medina agradeció la colaboración entre ambas fundaciones y destacó la importancia simbólica del momento, señalando que “San Olav y su ermita brillan, por fin, con luz propia”. Asimismo, puso en valor el entorno natural en el que se ubica la capilla, subrayando su singularidad paisajística y el equilibrio alcanzado entre la arquitectura y el medio que la rodea.
Por su parte, Jaime Alfonsín resaltó el carácter excepcional de la intervención, recordando que la capilla “atesora una notable riqueza histórica y un valor arquitectónico singular que la convierten en un referente único en España”. También subrayó el compromiso de la Fundación con la sostenibilidad y la conservación del patrimonio, destacando que el proyecto se ha desarrollado con “criterios de eficiencia energética y respeto al entorno, apostando por soluciones de iluminación limpia que contribuyen a una preservación responsable”.
Finalmente, el patrono Juan Munguira reconoció el papel que desempeña Iberdrola y su Fundación en la promoción cultural y social, tanto en España como en los países donde la compañía está presente. En sus palabras, quiso resaltar el liderazgo de la entidad en el impulso de la sostenibilidad y en el desarrollo de proyectos medioambientales, así como el compromiso personal y profesional del equipo directivo de la Fundación Iberdrola España.

Fuente de imágenes: Fundación Iberdrola España

