La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME) ha presentado el Observatorio de la Morosidad, impulsado por la Comisión contra la Morosidad, presidida por Luis Collado, ante el previsible incremento que va a registrar la morosidad este año como consecuencia de la pandemia.
De esta forma, CEPYME quiere intensificar el seguimiento y el análisis en profundidad de la morosidad, tanto pública como privada, su evolución en los últimos meses y cómo está afectando a las empresas, en especial a las de menor dimensión. Desde 2010 la Confederación viene realizando un seguimiento permanente de la evolución de la morosidad, que ahora se refuerza con la creación de la primera base de datos sobre morosidad de acceso público, que facilita un modelo de seguimiento permanente de la evolución de la morosidad y contribuirá a adoptar las propuestas más adecuadas para combatir esta mala práctica comercial y evitar los daños que la misma ocasiona a las pymes.
El Índice Sintético CEPYME de Morosidad Empresarial que aporta el Observatorio de la Morosidad mide las fluctuaciones coyunturales de los retrasos de pago basándose en los indicadores simples del Período Medio de Pago y el porcentaje de los importes pagados fuera de plazo.
En el segundo trimestre del año, el Indicador Sintético CEPYME de Morosidad Empresarial descendió ligeramente en comparación con el trimestre anterior. Sin embargo, la prevalencia de los retrasos en las cadenas de pago del tejido productivo nacional permaneció constante. Así, el porcentaje de facturas emitidas con retraso en pago se mantuvo en 68,7%, el mismo dato registrado durante el primer trimestre.
Como demuestran los últimos datos del Observatorio de la Morosidad, ésta se ha incrementado durante la pandemia, lo que perjudica especialmente a las pymes, acentuando además su pérdida de liquidez.
Durante los primeros seis meses de 2021 un 68’7% de las facturas, casi 7 de cada 10, registraron retraso en su pago. Y este retraso supuso un coste de financiación para las empresas que, en el primer trimestre del año, último dato registrado, se situó en los 1.472 millones de euros, una cifra un 3,5% por encima del nivel del primer trimestre del ejercicio anterior y la más alta desde 2013, cuando el coste financiero alcanzaba casi los 2.000 millones de euros.
Desde hace casi una década, CEPYME viene desarrollando una estrategia de sensibilización contra la morosidad comercial que padecen las pymes, dirigida al ámbito de las relaciones mercantiles entre las empresas y de éstas con las administraciones públicas.
Puede acceder al Observatorio de la Morosidad de CEPYME en el siguiente enlace:
https://www.cepyme.es/observatorio-morosidad/