Bosch, el proveedor de tecnología y servicios, está combinando el Internet of Things (IoT) con la inteligencia artificial (AI) y cree que la electromovilidad le permitirá desarrollar nuevas oportunidades de negocio gracias a los profundos cambios tecnológicos y ecológicos que, actualmente, se están produciendo.
«Bosch ha superado bien el primer año de la pandemia de coronavirus», declaró Volkmar Denner, presidente del Consejo de Administración de Robert Bosch GmbH, en la conferencia de prensa de presentación del balance anual de la compañía. «Somos uno de los ganadores en la transición hacia la electromovilidad y estamos expandiendo significativamente nuestro negocio de software al vincularlo con la inteligencia artificial».
En tecnología de propulsión, la electromovilidad se está consolidando como el principal negocio de Bosch. Denner informó que la compañía está realizando importantes inversiones anticipadas en esta área: otros 700 millones de euros este año. Hasta ahora, sus inversiones en electromovilidad ascienden a 5.000 millones de euros. Actualmente, los ingresos por ventas de Bosch en componentes para propulsión eléctrica están creciendo el doble de rápido que el mercado, casi un 40 por ciento. El objetivo es multiplicar por cinco las ventas anuales hasta alcanzar unos 5.000 millones de euros en 2025 y el equilibrio un año antes.
“La electromovilidad hace tiempo que dejó de ser una apuesta de futuro. Nuestras inversiones anticipadas están empezando ahora a dar sus frutos”, dijo el CEO de Bosch en la conferencia de prensa online. A finales de 2020, Bosch había obtenido pedidos por valor de más de 20.000 millones de euros. Tal y como explicó Denner, la tecnología de Bosch ha llegado incluso a Marte dentro de la misión actual de la NASA. Los sensores especiales de aceleración y velocidad de giro de Bosch son los responsables de estabilizar el helicóptero Mars Ingenuity, que ha estado enviando espectaculares imágenes desde el Planeta Rojo.
En el primer trimestre del año, las ventas del Grupo Bosch aumentaron un 17 por ciento por ciento interanual. «Con un buen primer trimestre, Bosch ha tenido un exitoso comienzo de 2021», afirmó Stefan Asenkerschbaumer, director financiero y vicepresidente del Consejo de Administración. El directivo expresó su confianza para 2021, aunque espera que sea otro año desafiante. Para el período actual, se espera que las ventas aumenten aproximadamente un 6 por ciento interanual, mientras que el margen operativo mejorará ligeramente, alcanzando aproximadamente el 3 por ciento – o alrededor del 4 por ciento sin los costes de reestructuración.
Sin embargo, esto dependerá de los efectos de los cuellos de botella de los semiconductores, que son difíciles de evaluar. “El año 2021 será un hito importante en nuestro camino para recuperar el margen objetivo entorno al 7 por ciento en los próximos dos o tres años”, explica Asenkerschbaumer. El alentador ejercicio económico 2020, a pesar de la pandemia, con un EBIT operativo de 2.000 millones de euros (ajustado por los efectos de las asignaciones del precio de adquisición de Automotive Steering y BSH Hausgeräte) le proporciona a Bosch una base sólida sobre la que continuar invirtiendo en áreas de importancia futura. Con unas ventas que ascendieron a 71.500 millones de euros, el gasto en investigación y desarrollo se mantuvo esencialmente sin cambios en los 5.900 millones de euros y el margen EBIT alcanzó el 2,8 por ciento. Ajustado por los gastos de reestructuración, que además gravaron el resultado en 2020, la cifra fue del 4,7 por ciento.
Megatendencia conectividad: los clientes se vuelven parte integral del desarrollo
Bosch quiere aprovechar la ventaja competitiva que deriva de su amplia experiencia en la combinación de conectividad (Internet of Things, IoT) e inteligencia artificial (AI) para generar negocios futuros y convertirse en una empresa líder en AIoT.
Bosch prevé que los productos habilitados para AI generarán unas ventas por valor de miles de millones de euros en los próximos años. Así, espera que las ventas de dispositivos habilitados para conectividad en el hogar se dupliquen: de cuatro millones el año pasado a unos ocho millones en 2021. Además, Bosch quiere usar la inteligencia artificial para evaluar datos relacionados con el uso de sus productos y, de esta forma, crear nuevas funciones y servicios para los clientes a través de las actualizaciones de software adecuadas.
“Conectar cosas conduce a conocer cómo se usan”, dijo Denner. «Esto nos permite mejorar continuamente nuestros productos, mantenerlos actualizados y brindar a nuestros clientes mayores beneficios». En el campo de la video seguridad, por ejemplo, el análisis de video basado en redes neuronales abre nuevas posibilidades. Con este fin, Bosch está integrando detectores tanto en cámaras nuevas como en una caja de inteligencia artificial que se puede conectar a los dispositivos instalados. La primera aplicación es un detector de tráfico que inicialmente podrá detectar y localizar vehículos con gran precisión en situaciones de tráfico intenso, incluso bajo condiciones difíciles de iluminación. Cuantos más datos fluyan hacia la aplicación del cliente, más podrá ayudar la AI, incluida la detección precisa de accidentes, dice la compañía.
Megatendencia electrificación: nuevas oportunidades en varias áreas de negocio
Los esfuerzos globales para combatir el cambio climático están impulsando la electrificación y el hidrógeno verde. Denner cree que la electrificación abre nuevas oportunidades en varias áreas de negocio: «La electrificación requiere soluciones no solo para la conducción eléctrica en los automóviles, sino también para la calefacción eléctrica en los edificios». Referente a la electromovilidad, los principales impulsores del cambio están siendo la caída de los costes de las baterías y los estándares de emisiones diseñados para cumplir los objetivos de acción climática. En tecnología de construcción, especialmente para calefacción y aire acondicionado, el uso de bombas de calor y de energías renovables está desempeñando un papel cada vez más importante.
En los sistemas de calefacción, por ejemplo, Bosch está creciendo mucho más rápidamente que el mercado con soluciones basadas en la electricidad. Las ventas de bombas de calor crecieron más del 20 por ciento en 2020 y Denner espera que se tripliquen para 2025. La compañía también anticipa que la rehabilitación de edificios residenciales solicitada en el marco del European Green Deal proporcionará un fuerte estímulo para el crecimiento. Teniendo esto en cuenta, Bosch quiere aprovechar su «peso inversor, su capacidad productiva a gran escala y su experiencia en comercialización». En el caso de las bombas de calor aire-agua de la compañía, que son particularmente eficientes y silenciosas, las ventas unitarias casi se duplicaron en Alemania en 2020.
Megatendencia hidrógeno: mercado de pilas de combustible por valor de miles de millones de euros
Bosch también se está enfocando en el hidrógeno: la compañía cree que el mercado del hidrógeno verde en la UE tendrá un valor de casi 40.000 millones de euros en 2030, con tasas anuales de crecimiento del 65 por ciento. Las pilas de combustible convierten el hidrógeno en electricidad y Bosch está desarrollando soluciones de pilas de combustible móviles y estacionarias. Entre 2021 y 2024, Bosch planea invertir más de 1.000 millones de euros en esta tecnología. «Bosch ya está lista para el hidrógeno», dijo Denner. El plan es poner en funcionamiento, este año, 100 plantas estacionarias de pilas de combustible que suministrarán electricidad a usuarios como centros de datos, fabricantes industriales y áreas residenciales. A finales de 2021, Bosch puso en marcha, junto con la empresa de servicios públicos municipales de Bamberg, una pila de combustible estacionaria de óxido sólido en el centro de esta ciudad alemana.
Bosch prevé que el mercado de componentes de pilas de combustible móviles tendrá un valor de unos 18.000 millones de euros a finales de la década. Denner cree que Bosch está bien posicionada en esta área: «También tenemos lo que se necesita para ser un líder en este mercado». Recientemente, Bosch ha creado una joint venture con la compañía china Qingling Motor Group para producir propulsiones de pila de combustible. Está previsto que una flota de prueba de 70 camiones esté circulando por las carreteras antes de finales de año.
Previsiones para 2021: a pesar de la confianza, sigue siendo un desafío
Bosch espera que la economía mundial crezca algo menos del 4 por ciento este año, después de haberse contraído en torno al 3,8 por ciento en 2020. «A pesar de que hemos comenzado con seguridad en 2021, la pandemia sigue planteando riesgos importantes», dijo Asenkerschbaumer. El director financiero agregó que Bosch es particularmente consciente de los cuellos de botella en el mercado automovilístico, especialmente en los semiconductores, que tienen una gran demanda.
La empresa está haciendo todo lo posible para ayudar a sus clientes en esta tensa situación. Sin embargo, no se espera una mejora a corto plazo y la situación puede afectar a la evolución comercial del año en curso. A largo plazo, Asenkerschbaumer cree que es necesario conseguir que todas las cadenas de suministro de la industria automotriz sean menos propensas a sufrir interrupciones. Además, alinear el negocio de movilidad con áreas de importancia futura como la electromovilidad, la conducción automatizada y las futuras arquitecturas de electrónica requiere enormes inversiones anticipadas. “En esta profunda transformación, 2021 será un año muy importante y desafiante para nosotros”.
Fuente de imágenes: Bosch