El Ayuntamiento de Valencia ha sido adjudicado con una ayuda de cinco millones de euros para consolidar a la ciudad como Smart City y dotar de inteligencia a 194 edificios municipales.
En todos esos espacios municipales se instalarán sensores medioambientales internos y externos que permitirán controlar la contaminación atmosférica y lumínica, la temperatura, la humedad, etc. También se incorporarán sensores de consumo de energía y agua para velar por la eficiencia energética y el ahorro económico.
Esta ayuda se une a la ya anunciada en diciembre del año pasado, por el que RED.es concecida un importe de 4,2 millones de euros para el desarrollo de doce proyectos dentro de la iniciativa “Impulso VLCi”. Como ya ocurriera entonces el Ayuntamiento de Valencia se hará cargo del 50 por ciento de la inversión mientras que la entidad estatal asumirá la otra mitad. El concejal de Administración Electrónica, Pere Fuset, declaró: “Situamos València en la vanguardia de las ciudades inteligentes tanto con el proyecto del año pasado, Impulso VLCi, como con esta Iniciativa Connecta VLCi con la que consolidamos la apuesta de nuestra ciudad para mejorar los servicios públicos en edificios deportivos, museos, monumentos, mercados municipales y escuelas”.
De manera complementaria, en 16 mercados municipales se creará una plataforma para que clientes, vendedores y gestores puedan ofrecer sus servicios online, mientras que en los edificios deportivos las personas usuarias de dichas instalaciones se verán beneficiadas por la nueva plataforma de gestión en la que podrán realizar reservas, ver las actividades que se ofertan y, gracias a los sensores de aforo y acceso, comprobar la disponibilidad de pistas. “Desde un punto de vista de gestión municipal, con la instalación de sensores en 58 edificios deportivos seleccionados pretendemos lograr un ahorro en tiempo y costes que redunden en beneficio de la ciudadanía”, ha explicado Fuset.
Para los 22 museos y monumentos presentados se va a ofrecer una plataforma de venta de entradas y un sistema de visualización de contenidos, así como opciones relacionadas con la realidad aumentada, la geolocalización y la experiencia de la persona usuaria.
Además, los edificios escolares también se beneficiarán de esta ayuda, con la implementación de sensores en cerca de un centenar de centros para que la comunidad educativa pueda contar con una plataforma de concienciación medioambiental.