La supermanzana del Poblenou es el campo de pruebas 5G-IoT, que incluirá proyectos basados en nuevas tecnologías con el objetivo de convertirse en un entorno de desarrollo de la investigación, el emprendimiento y la industria 5G en la ciudad. Además, se lanza un reto conjunto con la Fundación Mobile World Capital que busca propuestas aplicables al ámbito doméstico, sobre todo orientadas a mejorar la autonomía de las personas mayores a su casa.
El programa, denominado Improving Quality of Life for Elderly (at Home) through Technology, permitirá mostrar nuevos usos de la tecnología 5G y todas sus posibles aplicaciones, sobre todo en el ámbito de la Internet de las cosas.
Se reconocerán las propuestas que pongan la tecnología al servicio de la mejora de las condiciones de vida de la ciudadanía, y con relación a las personas mayores, que contribuyan a reducir las carencias cognitivas de este colectivo con respecto a:
- Problemas para llevar a cabo las actividades básicas de la vida diaria (alimentación, higiene personal, movimiento dentro del hogar, etc.).
- Problemas para llevar a cabo las actividades instrumentales de la vida diaria (utilizar transporte, las comunicaciones, control individualizado de salud, relaciones sociales, gestión monetaria, etc.).
- Problemas de seguridad (dentro de casa y fuera de casa).
Toda la superanzana del Poblenou —en los tramos comprendidos entre las calles de Pere IV, de Roc Boronat a Castilla, y de la Llacuna, de Pere IV a Sancho de Ávila—, será el ámbito de pruebas de la plataforma europea 5G FLAME (Facility Large-Scale Adaptative Media Experimentation), que permite el despliegue y la evaluación de servicios multimedia para experimentadores, principalmente pequeñas y medianas empresas y tejido local.
También en esta zona se desarrolla el programa 5GCity, que permite al propietario de la infraestructura tecnológica establecer contratos con operadores para ofrecer servicios de computación y de acceso a nivel radio a los usuarios.
Las torres multifunciones distribuidas en la zona integran, en un único punto, las antenas wifi, los sensores y otros elementos tecnológicos, cosa que optimiza el uso del mobiliario público, minimiza el impacto visual y facilita su mantenimiento.
De momento, ya se han realizado diferentes pruebas piloto que solo están a la espera de que se termine la infraestructura para poder empezar las pruebas y que han implicado a empresas destacadas como Ficosa o Betevé.
Fuente imágenes: Ayuntamiento de Barcelona