IMDEA Networks (Madrid) ha sido recientemente galardonada con el proyecto coordinado ENABLE-6G de la convocatoria UNICO 5G. El proyecto consta de dos subproyectos, RISC-6G y MAP-6G, y será desarrollado por un grupo de investigadores dirigido por el Dr. Domenico Giustiniano y el Dr. Joerg Widmer. Esta concesión de fondos permitirá al Instituto seguir investigando de forma pionera en el campo de las redes y contribuir al desarrollo de la próxima generación de tecnología 6G.
Las futuras redes 6G irán mucho más allá de los casos de uso de la 5G, ya que implicarán un gran número de dispositivos conectados, requisitos de rendimiento significativamente mayores y soporte para la detección detallada de objetos y del entorno, además de la comunicación. Para ello, las redes 6G tendrán que adoptar nuevas capacidades. El subproyecto RISC-6G abordará este problema con el objetivo de mejorar las comunicaciones inalámbricas, proporcionar detección del entorno y reducir significativamente la huella energética por dispositivo para evitar un enorme aumento del consumo general de energía de la red.
Para lograr estos ambiciosos objetivos se estudiarán dos tecnologías clave: la comunicación de luz visible de baja potencia (que utiliza luces LED para transmitir datos a través del espectro visible) y las superficies inteligentes reconfigurables (que dotan de capacidades de comunicación a la superficie de las paredes).
“La integración de las superficies reflectantes inteligentes (RIS, por sus siglas en inglés) mejorará la capacidad de la red y una mayor tolerancia a la pérdida de enlace, mejorando así los servicios móviles de los que dependen los ciudadanos y la industria. Al mismo tiempo, la mejora de la detección inalámbrica que permitirán las RIS hará posibles servicios totalmente nuevos, por ejemplo, en la asistencia sanitaria y la vigilancia del medio ambiente a distancia”, explica Joerg Widmer, investigador principal de uno de estos proyectos.
Por otro lado, el subproyecto MAP-6G contribuirá a la visión de que la 6G hará viable una inmersión sensorial total en el ciberespacio, pero exigiendo el manejo del aluvión de datos para permitir no sólo una mejora significativa del rendimiento de la red, sino también servicios sustancialmente más complejos. En particular, un concepto que se vislumbra para la 6G en 2030 es el de gemelo digital (‘digital twin’), que consiste en la representación virtual de un objeto físico en su contraparte digital en tiempo real. Aunque son muy prometedores, estos nuevos servicios y análisis también pueden suponer una amenaza para la privacidad. MAP-6G diseñará mecanismos nativos de aprendizaje automático que preserven la privacidad para que las aplicaciones 6G gestionen la gran cantidad de datos generados por los servicios en las redes 6G.
“Las soluciones del proyecto aprovecharán conceptos emergentes como el ‘aprendizaje federado’ para compartir con la infraestructura de red sólo los metadatos necesarios para prestar estos servicios, al tiempo que se protegen los datos personales”, añade el profesor Giustiniano.
Los demostradores finales integrarán los módulos desarrollados dentro de la red móvil utilizando bancos de pruebas compuestos por servidores de datos, nodos de borde y dispositivos de usuario final, con la ayuda de los socios industriales del proyecto. La innovación del proyecto coordinado desarrollará condiciones de mercado favorables que crearán un negocio sostenible para todos los actores de la cadena de valor, e impulsarán el crecimiento del mercado español, europeo y mundial.
“Un gran porcentaje del presupuesto se destina a la industria a través de convocatorias competitivas, con el objetivo de apoyar la investigación aplicada del proyecto, y fomentar la adopción por parte del mercado. Esto no sólo beneficiará a los socios que trabajan directamente en el proyecto, sino también a otros posibles interesados, gracias a las actividades dedicadas que se llevarán a cabo en el proyecto para el desarrollo de la comunidad con el fin de atraer a las pymes y a las startups”, destaca el profesor Giustiniano.
Además, la investigación beneficiará al desarrollo de equipos comerciales, prototipos de nivel industrial y plataformas experimentales más flexibles y abiertas, útiles para las pruebas de concepto de la 6G en su fase inicial.
En definitiva, el proyecto ENABLE-6G, iniciado en enero de 2022, es oportuno, ya que las soluciones que se diseñen podrán incorporarse a los sistemas pre-6G que se espera estén listos para su despliegue en torno a la misma fecha de conclusión del proyecto (diciembre de 2024).
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