El ‘F 015 Luxury in motion’ de Mercedes es el coche autónomo que la compañía ve para 2030 y así lo ha presentado en CES 2015 en Las Vegas. Está dotado con paneles LED en su exterior, tanto en el frente como en la parte trasera, que permiten comunicar si el coche está en modo autónomo, es decir conducido por sí mismo, o si hay un conductor al volante.
El F 015 Luxury in Motion incorpora módulos de luces LED de gran tamaño tanto en el frontal como en la parte trasera. Estos paneles LED se emplean para realizar diferentes funciones de alumbrado, pero también sirven para interactuar con el entorno y para indicar al resto de usuarios en qué modo está circulando el coche. Cuando es el coche el que conduce solo, los LED lucen en color azul mientras que si están de color blanco, indican que hay una persona a los mandos.
Una de las características más impresionantes es su habitáculo, amplio y con sillones giratorios, que se giran automáticamente 30 grados al abrirse a las puertas, para la comodidad de los pasajeros en sus movimientos de subida o bajada. Los asientos delanteros también se pueden girar salvo el del conductor si este ha decidido conducir.
Una “digital arena» como la llama Mercedes permite el intercambio continuo de información entre el vehículo, los ocupantes y el entorno. Para ello se han instalado seis displays, integrados en el panel de instrumentos, en las paredes laterales y en la pared trasera, que convierten el interior del F 015 Luxury in Motion en un salón perfectamente interconectado. El F 015 funciona también integrado con la nube para poder por ejemplo planificar el viaje del día siguiente en la noche anterior desde el ordenador, subiendo los datos a la nube para que al día siguiente el coche ejecute la ruta y todas las órdenes, como que ya este a la temperatura adecuada al subirnos en el. La conectividad y autonomía presentan un mundo de nuevas posibilidades de interacción con la infraestructura urbana y una nueva concepción de la movilidad urbana. Tal como existen zonas de circulación restringida por razones ecológicas, podrían crearse también zonas de seguridad especiales, en las que solamente puedan circular los vehículos autónomos o liberarse espacio en zonas concretas de la ciudad en momentos puntuales mediante el guiado sistemático de los vehículos autónomos a estacionamientos en la periferia de las ciudades.
El coche es un 40% más ligero que los actuales Mercedes de Clase S al estar fabricado en una combinación de aluminio, acero de alta resistencia y plástico reforzado de fibra de carbono. Su motor es híbrido de hidrógeno y eléctrico, con una autonomía de casi 200 kilómetros solo en modo eléctrico. Está concebido para que se le pueda incorporar una propulsión eléctrica mediante pila de hidrogeno para lo que produce electricidad a bordo a partir de hidrógeno con una batería de litio-azufre de alto voltaje recargable en un enchufe.
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