Autor: Jose Leandro Espada / Electrónica OLFER
Digital Multiplex (DMX) es un protocolo de comunicación estandarizado creado en 1986 específicamente para el control de iluminación y efectos espectaculares. Su uso se ha popularizado, más en Estados Unidos que en Europa, y se ha extendido a otras aplicaciones (iluminación arquitectónica, decorativa, etc.). La última versión es DMX512-A, conocida coloquialmente como DMX512.
Este protocolo está basado en el estándar industrial RS-485 que utiliza tensiones diferenciales (usa tres hilos: DMX+, DMX- y COM) lo que le confiere una alta inmunidad frente al ruido EMI y permite comunicar datos a largas distancias (300m) y a alta velocidad (250 kbaud).
DMX nació como una comunicación unidireccional entre un único equipo controlador Maestro y los receptores esclavos. En 2006 se introdujo la función opcional RDM (Remote Device Management), que utiliza comunicación bidireccional para poder hacer otras funciones como, por ejemplo, configurar remotamente la dirección DMX de los receptores desde la consola de control maestra o conocer su estado, averías, etc.
Funcionamiento:
El Controlador DMX envía tramas de hasta 512 Bytes continuamente y no requiere confirmación de que la información haya llegado a los dispositivos receptores. Los 512 Bytes se transmiten en menos de 23mS y se vuelven a transmitir de nuevo, continuamente. Cada Byte contiene la información de un canal, por lo que podemos tener hasta 512 canales (el conjunto de 512 canales es lo que se conoce como un Universo DMX).
Cada canal puede tener un valor entre 0 y 255 (8 bits). Este valor va a determinar el nivel de regulación de una luminaria, la velocidad de un motor, el ángulo de orientación de un proyector, etc. Por ejemplo: Un proyector RGB va a necesitar utilizar tres canales consecutivos, ya que el valor de cada canal definirá el nivel de regulación de cada color: rojo, verde, azul. Todos los receptores del bus DMX reciben la información de todos los canales, pero solo van a utilizar la de los canales que les corresponda.
La forma de decidir que canales va a usar un receptor se hace al asignarle una dirección DMX. La dirección DMX que asignemos define implícitamente el número del primer canal que usará el receptor. Por ejemplo, si asignamos la dirección DMX 012 a un proyector RGB, solo tendrá en cuenta la información de los canales 012, 013, 014 y hará caso omiso de la información del resto. El controlador maestro también debe saber que en la dirección DMX 012 hay un foco RGB, para poder comunicarle la información a través de los canales correspondientes.
En DMX, varios receptores del mismo tipo pueden tener la misma dirección. De esta forma recibirán la información simultáneamente.
Direccionamiento:
Existen diversas maneras de poder asignar manualmente la dirección a un receptor esclavo. Las más habituales son:
- Mediante Dipswitch. Cada microinterruptor tiene un valor asignado. La suma de los que estén activados define la dirección DMX.
- Mediante Displays. El ajuste de los dígitos se hace mediante pulsadores.
- Mediante una App como la Light APP del fabricante DALCNET o la EasyNFC de INFINITUM POWER (después se transfiere mediante NFC desde el teléfono al equipo).
Aquellos equipos compatibles con RDM permiten ser direccionados desde el master u otro programador a través del propio bus de comunicación.
Instalación:
Solo puede haber un controlador maestro en cada bus DMX. El bus DMX es de tipo Daisy Chain (un equipo va conectado a la salida DMX del anterior). Es habitual que los esclavos receptores tengan conexiones separadas para DMX in y DMX out. En el caso de que los receptores tengan una única conexión para el bus DMX, se conectan en paralelo. En la figura 2 mostramos dos equipos DLX1224-4CV-DMX:
Se pueden conectar hasta 32 equipos consecutivos en una cadena. Para conectar más, hay que intercalar repetidores (Booster).
El cable debe ser de tipo trenzado y apantallado, de 120 Ohm de impedancia (es el mismo que se utiliza para la comunicación industrial por RS485). Al final del bus y antes de cada repetidor es necesario colocar una resistencia de terminación de 120 Ohm entre DMX+ y DMX-. Esta resistencia puede venir ya incorporada en los propios equipos. Cuando la distancia de cable es muy corta puede funcionar sin la resistencia (aunque el estándar DMX obliga a usarla siempre). La malla del cable debe conectarse a tierra, pero solo en uno de sus extremos (normalmente en el que va al controlador Maestro).
Aplicaciones en iluminación:
A la hora de utilizar proyectores RGB o RGBW encontraremos que hay más gama de modelos regulables por DMX que regulables por DALI DT8. También se pueden controlar luminarias monocolor o de blanco dinámico, relés, etc.
Es posible hacer control de una sola luminaria o de grupos de luminarias mediante un controlador master como el CasDMX (configurado mediante Casambi Bluetooth). De esta forma DMX puede combinarse con pulsadores, sensores y convivir con otros protocolos de control. También hay paneles táctiles sencillos que hacen de master y permiten controlar varios grupos/zonas, o se pueden controlar múltiples universos DMX con miles de focos y efectos mediante controladores más avanzados y potentes programas de PC (figura 3 superior).
DMX se aplica también al alumbrado deportivo ya que los focos que iluminan el área de juego ahora también se utilizan para crear efectos. Para ello es necesario que los drivers LED utilizados sean capaces de responder rápidamente. Por ejemplo, el fabricante UPOWERTEK ha desarrollado drivers LED para luz blanca o RGBW, controlados por DMX, desde 320W hasta 2000W capaces de crear efectos hasta a 40fps (figura 3 inferior).
Aunque el uso de DMX se venía asociando principalmente al control de iluminación espectacular, actualmente puede integrarse fácilmente y considerarse como una alternativa más a utilizar en otras aplicaciones. Consulte la gama de controladores y led driver DMX de Electrónica OLFER.
Fuente de imágenes: Electrónica OLFER