La construcción sostenible se afianza en España, pasando de ser una moda para convertirse en una necesidad que tanto promotores como compradores, pasando por administraciones, tienen cada día más claro. Una muestra de esta tendencia es actividad de BREEAM, uno de los certificados de construcción sostenible de referencia en España, que solo en 2020 certificó la sostenibilidad de 270 edificios, un 20% más que en el ejercicio anterior, y ha evaluado la sostenibilidad de más de 1.000 desde que hace 10 años se implantase en España.
Para el director de BREEAM España, Javier Torralba, “a pesar de la difícil situación provocada por la pandemia, el interés por la sostenibilidad se ha incrementado un 20% con respecto al año pasado. Esta tendencia de crecimiento que experimentamos ha sido posible porque la sostenibilidad en la construcción se confirma como una obligación a la vista de todas las circunstancias que vivimos y factores que nos rodean. El calentamiento del planeta, situaciones como las que vivimos con el COVID, el compromiso de reducir en un 55% las emisiones CO2 en la UE para el 2030 o los compromisos para ser neutrales en el 2050 nos obligan a apostar por la construcción sostenible y BREEAM asumirá una posición de liderazgo a nivel nacional y a nivel mundial”.
En cuanto a las categorías de las certificaciones emitidas por el sello en 2020, la mayor parte han sido “En Uso”, a las que le siguen las certificaciones de “Vivienda” y la de “Nueva Construcción”. Esto en lo que se refiere al cierre de certificaciones. Pero, además, BREEAM registró el pasado año 345 edificios que se encuentran en fase de certificación. En este caso, la mayor parte vuelve a ser sobre edificaciones “En Uso”, seguidas de “Vivienda”, “Nueva Construcción” y “Urbanismo” (en esta categoría destaca el registro de 5 proyectos).
Los certificados mejor valorados y, por lo tanto, los que han recibido una mayor puntuación el pasado ejercicio son la Plataforma Logística de LIDL (Cheste), el CC. El Triangle (Barcelona) o la urbanización Sabina Ibiza. Entre los edificios más singulares certificados por BREEAM cabe destacar la rehabilitación del antiguo Banco de España de San Sebastián, el centro logístico de SEUR (Illescas) o la rehabilitación de la sede de Idilia Foods (fabricantes de Cola Cao y Nocilla), en Barcelona.
Por su parte, entre los edificios que se encuentra en trámites para recibir su certificación, cabe destacar el Palacio de Congresos y Exposiciones del Recinto Ferial de Las Palmas de Gran Canaria, el Hotel Hilton Diagonal Mar de Barcelona o Port Aventura Dream Villages, en Tarragona.
BREEAM AWARDS 2020
El Hospital Universitario Infanta Sofía fue el único proyecto español ganador en los premios BREEAM Awards 2020, los más prestigiosos en el ámbito de la construcción sostenible a nivel internacional. En concreto, el edificio situado en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes, fue el vencedor en la categoría “Public Sector – In Use”, que reconoce al inmueble público más sostenible del año certificado bajo el esquema BREEAM® En Uso.
Por su parte, Sabina Ibiza, que resultó finalista en esta edición, es una de las residencias de un complejo promovido por Sabina Estates ubicado en la Costa Oeste de Ibiza. Cuenta con un certificado BREEAM® Excelente, una de las puntuaciones más altas obtenidas por un edificio residencial en España.
Diez años de BREEAM en España
BREEAM ha certificado la sostenibilidad de 800 edificios desde su adaptación en 2010 al idioma, normativa y práctica constructiva de España. Además, otros 464 proyectos están actualmente en proceso de obtener el certificado, lo que suma un total de 1263 edificios.
Geográficamente, existen proyectos sostenibles en todas las comunidades autónomas, agrupando Madrid y Cataluña más de 60% del total de edificios evaluados.
Los edificios de oficinas suponen un 33% del total de certificaciones, con edificios tan representativos como las sedes corporativas de Orona o MRW, el campus de AIRBUS en Getafe, la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea en Alicante, Torre Agbar en Barcelona, Torre Espacio y Torre Cepsa en Madrid o la rehabilitación de la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores. Las superficies destinadas a uso comercial suponen un 26%, incluyendo más de 70 centros comerciales.
Por su parte, el sector residencial representa un 23% del total de certificados, experimentando un notable crecimiento exponencial en los últimos 3 años en los que se pasó de 40 viviendas certificadas por BREEAM a las más de 22.000 que hoy se encuentran repartidas en 125 promociones residenciales. El sector industrial y logístico supone un 10% de la actividad de BREEAM, y también han sido evaluados hospitales y edificios de entidades de investigación sanitaria como la Fundación Josep Carreras o el Institut Guttman. Hoteles, bibliotecas o pabellones deportivos como el Buesa Arena de Vitoria son otros ejemplos de edificios con un alto nivel de sostenibilidad.
El equipo BREEAM está formado por 25 profesionales, empleados directos e indirectos, y se prevé incrementar la estructura de personal en un 20% en 2021. Además, el pasado ejercicio fueron impartidos 25 cursos de formación en los que participaron más de 300 personas, y más de 30 sesiones online gratuitas para divulgar los beneficios de una construcción sostenible.
Objetivos para el 2021
En cuanto a las previsiones para este ejercicio, y teniendo en cuenta que más del 50% de los edificios de viviendas tienen más de 40 años y que el 85% de las viviendas en España tienen una calificación E (lo que las define como ineficientes), Javier Torralba incide en que “nos encontramos en una situación límite. En esta década en España se deberían rehabilitar casi 300.000 viviendas al año y prácticamente no llegamos al 10% de este objetivo. Es alarmante el hecho de que los edificios residenciales son los responsables del 40% del total de las emisiones de CO2.
Atendiendo a estas cifras, un certificado como BREEAM tiene que jugar un papel esencial para poder alcanzar los objetivos a nivel nacional y a nivel mundial. En este contexto, se hace fundamental el compromiso de las Administraciones Públicas, unas ventajas fiscales adecuadas y unas herramientas financieras ventajosas”.