Bosch y Daimler han alcanzado un hito en el camino hacia la conducción automatizada: ambas empresas han obtenido la aprobación de las autoridades competentes de Baden-Württemberg (Alemania) para su sistema de aparcamiento automatizado, en el aparcamiento del Museo Mercedes-Benz de Stuttgart. El servicio de aparcamiento automatizado es accesible a través de una aplicación de Smartphone y no requiere un conductor por motivos de seguridad. Esto la convierte en la primera función de aparcamiento SAE Level 4 sin conductor, totalmente automatizada del mundo y aprobada oficialmente para uso diario.
Esta decisión de las autoridades demuestra que innovaciones como el parking automatizado, son posibles en Alemania», dice el Dr. Markus Heyn, miembro del Consejo de Administración de Robert Bosch GmbH. «La conducción y el aparcamiento sin conductor son elementos importantes para la movilidad del mañana. El sistema de aparcamiento automatizado muestra hasta dónde hemos avanzado en esta vía de desarrollo”.
Esta aprobación por parte de las autoridades de Baden-Württemberg sienta un precedente para en el futuro, obtener la aprobación del servicio de aparcamiento en los parkings de todo el mundo», dice el Dr. Michael Hafner, director de tecnologías de conducción y conducción automatizada de Daimler AG. «Como pionero en la conducción automatizada, nuestro proyecto allana el camino para que el parking automatizado comience su producción en serie en el futuro”.
Jugar a lo seguro: dos socios con un objetivo en común
Desde el principio, la máxima prioridad de Bosch y Daimler para el servicio de aparcamiento sin conductor, ha sido la seguridad. Dado que todavía no existe un proceso de autorización oficial para las funciones de conducción automatizada que no requieren conductor, las autoridades locales – la autoridad administrativa regional de Stuttgart y el Ministerio de Transporte del Estado de Baden-Württemberg – supervisaron el proyecto desde el principio, junto con expertos de la autoridad de certificación alemana TÜV Rheinland. Su objetivo era evaluar la seguridad de funcionamiento de la tecnología del automóvil y de los aparcamientos.
El resultado es un concepto de seguridad integral con los ensayos adecuados y criterios de admisión, que puede aplicarse más allá de este proyecto piloto. En el concepto, los desarrolladores definieron cómo el vehículo sin conductor detecta a los peatones y otros coches que se cruzan en su camino y se detiene de forma fiable cuando se encuentra con un obstáculo. También, establecieron comunicaciones seguras entre todos los componentes del sistema y tomaron medidas para garantizar la activación fiable de la maniobra de aparcamiento.
La tecnología detrás del aparcamiento sin conductor
Conducir hasta el parking, bajar del coche y enviarlo después a una plaza de aparcamiento, simplemente, tocando la pantalla de un smartphone. El parking automatizado no necesita conductor. Una vez que el conductor ha dejado el aparcamiento para ocuparse de sus asuntos, el coche se dirige por sí mismo, a un espacio asignado para aparcar. Más tarde, el coche vuelve al punto de entrega exactamente, de la misma manera. Este proceso se basa en la interacción entre la infraestructura de aparcamiento inteligente de Bosch y la tecnología de automoción de Mercedes-Benz. Los sensores de Bosch, vigilan el pasillo de acceso y sus alrededores, proporcionando la información necesaria para guiar el vehículo. La tecnología del coche convierte los comandos de la infraestructura en maniobras de conducción. De esta manera, los coches pueden incluso subir y bajar rampas para moverse entre las plantas del aparcamiento. Si los sensores de infraestructura detectan un obstáculo, el vehículo se detiene inmediatamente.
Hitos del proyecto
Bosch y Daimler comenzaron a desarrollar un sistema de aparcamiento sin conductor, totalmente automatizado en 2015 y en el verano de 2017, su solución piloto en el aparcamiento del Museo Mercedes-Benz de Stuttgart, alcanzó un importante hito: el aparcamiento automatizado en condiciones reales, con y sin conductor al volante, fue presentado al público por primera vez. Este estreno fue seguido de una intensa fase de pruebas y puesta en marcha. A partir de 2018, los visitantes del museo pudieron utilizar el servicio de aparcamiento, acompañados por personal de seguridad formado para esta iniciativa, y compartir su experiencia. Una parte del proyecto piloto consistió en comprobar la iluminación de los vehículos. La luz turquesa indica que un vehículo está en modo de conducción automatizada e informa a los transeúntes y a otros usuarios de la carretera, de que el vehículo está siendo conducido por sí mismo. Los resultados de estas pruebas se reflejan en la norma SAE 313, publicada recientemente. La obtención de la aprobación final de las autoridades es otro importante hito para Bosch y Daimler. Pronto, las partes interesadas podrán experimentar el innovador servicio de parking a diario, en el aparcamiento del Museo Mercedes-Benz y sin la supervisión adicional de un conductor.
Fuente de imágenes: Daimler