El Jardín de Infancia Kreuzfeld, ubicado en la municipalidad de Altach (Austria), es un ejemplo de cómo la arquitectura y la iluminación pueden converger para crear un ambiente optimizado tanto para la funcionalidad educativa como para la sostenibilidad ambiental.
Construida con una visión de sostenibilidad a largo plazo, la nueva guardería ha sido erigida a partir de una estructura de madera, flexible y fácil de desmontar, que la ha llevado a obtener el premio de construcción en madera Vorarlberg en la categoría de ‘Edificios Públicos’.
“El jardín de infancia, con su delicado lenguaje arquitectónico y su estructura de madera de fácil montaje, crea un edificio atmosférico con un carácter reconocible, que es al mismo tiempo es una expresión de construcción y materialidad”, señalan los miembros del jurado.
En el núcleo de la guardería se halla el salón de descanso situado en la planta baja, que está circundado por diversas áreas comunes y gimnasios. Las instalaciones dedicadas a la guardería y las aulas ubicadas en el piso superior están resguardadas del intenso calor producido por la luz solar directa, gracias a las galerías adyacentes. La presencia de un estacionamiento subterráneo posibilita que los espacios exteriores se mantengan despejados, proporcionando un área amplia para que los niños jueguen y se desplacen libremente al aire libre.
En este contexto, la iluminación desempeña un papel esencial, ya que, además de satisfacer los requisitos normativos, se debe planificar con la intención de generar un entorno cálido y acogedor, fundamental para el bienestar y el desarrollo de los niños. Para ello Zumtobel, ha creado un concepto de iluminación de última generación para la guardería que satisfaciera estos requisitos.
“Hogar y guardería, espacios internos y externos: los cambios entre ambientes o situaciones pueden resultar emocionalmente desafiantes, especialmente para los niños pequeños. Para atender las necesidades de seguridad y orientación de los niños, los espacios de transición como pasillos o vestíbulos, deben diseñarse de manera atractiva y contar con una iluminación adecuada y clara”, señalan desde Zumtobel.
Con esta finalidad, se colocaron 85 downlights redondos PANOS de Zumtobel. Discretos a la vez que envolventes, estos equipos son capaces proporcionar una excelente visibilidad en los pasillos y proyectan una luz cálida y acogedora sobre las superficies de madera.
En las aulas de la guardería Kreuzfeld, tanto los elementos arquitectónicos como el mobiliario han sido cuidadosamente seleccionados para ofrecer un acabado en madera que es tanto acogedor como neutral. En este entorno sereno, los juguetes coloridos y las obras de arte infantiles resaltan, capturando la atención como puntos focales vibrantes. Este efecto se ve reforzado por las 89 luminarias lineales LINARIA semiempotradas en los techos, diseñadas para proporcionar la iluminación ideal para actividades creativas como pintar, hacer manualidades y jugar.
Para ayudar a los niños a procesar todas estas nuevas experiencias y regular sus emociones, es crucial disponer de espacios dedicados a la privacidad y el descanso. En este sentido, la guardería ha implementado «nichos acogedores» a lo largo de sus escaleras, equipados con cortinas que permiten crear un ambiente íntimo cuando se requiere. La iluminación en estos nichos ha sido estratégicamente planificada para evitar que se perciban como lugares oscuros o intimidantes, manteniendo en cambio una sensación de luminosidad y calidez, lo que convierte estos espacios en perfectos refugios seguros para los niños.
Finalmente, 27 luminarias atmosféricas BEGA para exteriores, garantizan la seguridad y la orientación alrededor del jardín de infancia. Estas luminarias son esenciales para mantener un entorno seguro y accesible, acorde con el funcionamiento continuo de la guardería a lo largo del día.
Imágenes: Zumtobel. Crédito fotográfico: Jens Ellensohn Fotografie