Iluminar la ampliación del Puente de Rande ha supuesto un desafío en uno de los iconos más reconocibles de la Ría de Vigo.
Hito de la ingeniería, el Puente de Rande es uno de los puentes más característicos de España, con sus 1.558 metros de longitud y disposición de cables en abanico en dos planos, su estructura de alza ligera a una altura de 48 metros sobre el nivel del mar. La construcción de este puente atirantado ha sido clave para la autopista del Atlántico.
Debido al flujo de tráfico que ha ido en aumento durante las últimas décadas, en 2015 se inician los trabajos de ampliación. Se trata de un trabajo de ingeniería único que lo convierte, una vez más, en el primer puente atirantado que se amplía del mundo. Lo hace con dos carriles adosados aumentando su capacidad en un 42%, a día de hoy el puente puede gestionar hasta 95.000 vehículos al día.
Los nuevos carriles sobresalen 6 metros de la plataforma central y están unidos a ella por unas costillas metálicas que proporcionan máxima estabilidad. Dicha ampliación tenía que contar con la mejor solución lumínica. Un reto que Zumtobel Group ha sabido solventar con éxito introduciendo la luz como herramienta de diseño urbano.
Zumtobel Group ha optado por la solución Orus LED. Un alumbrado vial innovador que facilita la visibilidad y orientación funcional, reduce el consumo energético y aporta una nueva identidad visual que influye positivamente en la percepción de los conductores.
Un total de 320 unidades instaladas a una altura de 0,9 m y una inter distancia de 10 metros entre ellas que logran un ahorra energético que podría situarse en torno al 60%. Además del bajo consumo energético y la sostenibilidad, es importante destacar la nueva tecnología patentada Flat Beam. Un sistema óptico que ofrece una distribución controlada y extremadamente nítida, aporta un mayor control del alumbrado, mayor comodidad para la conducción nocturna y reducción del consumo eléctrico.
Gracias a la poca altura de la instalación se evita el deslumbramiento directo a los conductores, de igual modo se evita el efecto de la ocultación y las molestas sombras. La luz se distribuye por detrás y por debajo de los vehículos.
El mantenimiento es otra de las características a destacar ya que, al tratarse de una luminaria a baja altura, no es necesario elevarse a 12 metros de altura y ofrece mayor seguridad al personal. Por otro lado, las luminarias están preparadas para hacer frente a condiciones meteorológicas extremas y son resistentes al ambiente marino.
El alumbrado vial supone un reto en sí mismo y Zumtobel Group ha encontrado la solución idónea para evitar contratiempos de ningún tipo.