El Ayuntamiento de Zumaia ha anunciado que ha recibido la resolución favorable por parte del IDAE, en relación con la ayuda solicitada para poner en marcha el proyecto de mejora de la eficiencia energética de las instalaciones de alumbrado público del municipio y por el que se recibirán 580.000 euros, el 50% del presupuesto, para su financiación. 

En total, el Ayuntamiento destinará un total 1.177.000 euros a mejorar la eficiencia del alumbrado público en la segunda fase, que incluye la renovación de 1.503 farolas (en total hay 2.344 farolas en Zumaia), así como la de los 111 semáforos.

Las nuevas luces serán de tecnología LED de última generación y de alta eficiencia y contarán con un driver electrónico programable que permitirá adaptar el flujo luminoso según el horario y los tipos de vías. En cuanto a los cuadros de mando, se mejorarán 33 (el resto de los 13 cuadros de mando existentes en la localidad fueron modificados por la primera fase). Además, se instalará un sistema de telegestión y se sustituirán los cables y las columnas en mal estado. Por último, por imperativo legal, en algunos ámbitos se modificarán los sistemas de luz.

El objetivo del proyecto es, además de reducir el consumo energético de la localidad, impulsar la eficiencia energética y minimizar los daños al medio ambiente. Además, el Ayuntamiento de Zumaia ahorrará en consumo energético, destinando esta cantidad a otro tipo de medidas para mejorar Zumaia.

Reducción del 75% en el consumo energético

La potencia instalada  bajará de 248,29KW a 59,52KW; en semáforos de 9,178KW a 2,31 Kw. Gracias a esta notable bajada de potencia, y con todos estos cambios que se prevén en el proyecto, el consumo energético bajará notablemente: un 75%. Además, se reducirá en 446,41 toneladas la emisión de CO2 a la atmósfera.

El Ayuntamiento de Zumaia abordó en 2016 la iniciativa de mejorar el alumbrado público de la localidad. Se realizó una auditoría y se determinaron los pasos hacia adelante. Esta primera fase es muy bien valorada por los técnicos municipales. De hecho, se ha conseguido un ahorro en el consumo cercano al 73% y se han reducido mucho las tareas de mantenimiento. Además, los niveles de iluminación se han adaptado a los límites legalmente establecidos.

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