Villaviciosa de Odón está haciendo frente al cambio del alumbrado de su casco urbano a tecnología LED y la cifras que deja la actuación muestran la relevancia de uno de los proyectos más importantes del municipio en los últimos años: 4.632 luminarias, más de 1,5 millones de inversión, y un ahorro estimado de más del 72%.
Se trata de las obras de sustitución a tecnología LED de las instalaciones de alumbrado exterior del municipio para la mejora de eficiencia energética, un proyecto acogido a la línea de ayudas para la renovación de las instalaciones de alumbrado exterior municipal que está cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y gestionada por el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) con cargo al Fondo Nacional de Eficiencia Energética. La financiación de este proyecto que, como ya se ha mencionado, supera el millón y medio de euros, lo afrontará el Ayuntamiento de Villaviciosa de Odón gracias a un préstamo otorgado por el IDAE a pagar en diez años y con interés cero.
David Prieto, concejal de Medio Ambiente, área que está liderando el seguimiento de esta actuación, ha comprobado en primera persona el desarrollo de los trabajos junto a técnicos municipales y a responsables de la empresa concesionaria. Según señala el edil, ya ha finalizado la primera fase que ha consistido en la adaptación de los actuales centros de mando a la nueva tecnología y la instalación de otros veintisiete nuevos. “En estos momentos estamos afrontando la segunda y última fase que consiste en la instalación en cada una de las luminarias de las nuevas lámparas que llevan incorporada la tecnología LED, lo que permitirá reducir en gran medida la potencia instalada, manteniendo la calidad de la iluminación mejorando de este modo la eficiencia de las instalaciones y, lo que es más importante, conseguir un importante ahorro energético”.
Sistema de telegestión
Igualmente, este proyecto también incorpora un sistema de telegestión, es decir, una aplicación que permite gestionar el mantenimiento y el control del alumbrado público de forma que se pueden ajustar los encendidos y los apagados, controlar el sistema de ahorro, supervisar el consumo energético, vigilar el correcto funcionamiento de la instalación, generar acciones de mantenimiento preventivo, etcétera. Se calcula que este sistema puede proporcionar un ahorro adicional en el consumo que hay que sumar al ahorro del 72% respecto al actual.
Estos datos se completan con otros que también contribuyen a apreciar los beneficios y ventajas de esta tecnología como son que el consumo anual en kilowatios hora disminuirá de 2.532.201 a 687.978 y el coste anual en consumo pasará de 315.718,85 euros a 86.960,40 euros, según la auditoría realizada. También es significativo que este ahorro económico va a suponer recuperar la inversión realizada en seis años y medio aproximadamente.
Las diferencias en cuanto a la luminosidad de estas nuevas lámparas respecto a las actuales de vapor de sodio de alta presión ya se pueden apreciar, por ejemplo en la calle Alemania. Se pretende en futuros proyectos hacer extensiva esta tecnología a las urbanizaciones.