Valencia ha aprobado solicitar un nuevo crédito de cuatro millones de euros al Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía, dependiente del Gobierno, para reducir la contaminación lumínica de la ciudad. El propósito es la renovación de un total de 8.098 luminarias de las farolas modelos Valencia y Fernando VII, que serán sustituidas por modelos de menos consumo y con una contaminación lumínica reducida.
Al hacerse público este acuerdo, el concejal delegado del área de Gobierno Interior, Sergi Campillo, ha recordado que, al llegar al Ayuntamiento, el actual equipo de gobierno ya solicitó y obtuvo una primera financiación del IDAE por un importe de 4 millones de euros para actuar en 31.274 luminarias de la ciudad, “caracterizada entonces por tener un exceso de iluminación, y consiguientemente un importante gasto energético y económica”.
Las actuaciones financiadas con esta primera ayuda del mencionado organismo público adscrito al Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, empezarán a ejecutarse a principios de julio y permitirán el cambio de más del 30% de las luminarias de la ciudad. La estrategia municipal para hacer de València una ciudad eficiente desde el punto de vista de la iluminación contempla un nuevo proyecto de renovación y mejora de las farolas, para el cual el Ayuntamiento opta a la segunda concesión de ayudas destinadas a incentivar y promover la realización de acciones en el sector de alumbramiento exterior municipal que reduzcan las emisiones de dióxido de carbono, mediante la ejecución de proyectos de ahorro energético.
Concretamente, el Ayuntamiento prevé intervenir en más de 6.000 unidades (6.156) de los faroles llamados “*Valèncià”, que, sobre todo, se encuentran en el centro de la ciudad y son muy contaminantes. Serán cambiados por tecnología led mucho más eficiente y que sólo ilumina hacia abajo. Además de estas farolas de estilo isabelino se cambiarán 1940 unidades de los faroles Ferran VII por otras luminarias más eficientes.
“Queremos hacer de València una ciudad eficiente desde el punto de vista de la iluminación y por eso nos volvemos a acoger a esta línea de ayudas que concede el citado instituto, que depende del Ministerio, al 0% de intereses y 12 meses de carència para devolver el dinero”, ha concretado el concejal.
“Con esta política, pasaremos de gastarnos un millón de euros en factura eléctrica al precio actual de la energía, a poco más de 148.000 euros, es decir, ahorraremos un 85% y, además, minimizaremos al máximo la contaminación lumínica hacia el cielo”, ha concluido Sergi Campillo.