Si las numerosas evidencias que muestran cómo el uso intensivo de móviles y tablets durante la noche puede afectar de forma negativa a nuestra salud no han sido suficientes para que corrijas este hábito, una nueva investigación puede hacer que cambies de opinión si eres hombre. Un nuevo estudio encuentra correlaciones entre el uso de los medios electrónicos por la noche y la mala calidad del esperma. 

Los resultados preliminares de la investigación, publicados recientemente en el suplemento online de la revista  SLEEP Volume 43 (2020) – publicación oficial de la Sleep Research Society, muestran que una autodeclarada mayor exposición a dispositivos de comunicación de emisión de luz por la noche y después de la hora de acostarse se asocia con una disminución de la calidad del esperma. Tanto la concentración como la movilidad del esperma, es decir, la capacidad de los espermatozoides de “nadar” adecuadamente, fueron menores en aquellos hombres que afirmaron tener un mayor uso de los móviles y tablets por la noche.

“El uso de teléfonos inteligentes y tablets por la noche y después de la hora de acostarse se correlacionó con la disminución de la calidad del esperma. Además, el uso de tanto el uso de los móviles por la noche, el uso de tablets después de la hora de acostarse, así como el uso de la televisión por la noche, se correlacionaron con la disminución de la concentración de esperma”, explica Amit Green, PhD, jefe de investigación y desarrollo del Instituto del Sueño y la Fatiga del Centro Médico Assuta en Tel-Aviv, e investigador principal del estudio. 

Los investigadores obtuvieron muestras de semen de 116 hombres de entre 21 y 59 años de edad que se sometieron a una evaluación de fertilidad (volumen, concentración, porcentaje de motilidad y recuento total de espermatozoides). Los participantes completaron cuestionarios sobres sus hábitos de sueño y el uso de dispositivos electrónicos. El uso de teléfonos inteligentes y tablets por la noche y después de la hora de dormir estaba correlacionada negativamente con la motilidad del esperma, su motilidad progresiva y la concentración del mismo, y de forma positiva con el porcentaje de esperma inmovil. 

El estudio también encontró una correlación entre una mayor duración del sueño y un mayor número de espermatozoides totales y una mayor movilidad progresiva. En cambio, la mayor somnolencia se asoció con una menor calidad de los espermatozoides.

“Hasta donde sabemos, este es el primer estudio que reporta este tipo de correlaciones entre la calidad del esperma y el tiempo de exposición a la luz de corta longitud de onda emitida por los medios digitales, especialmente los teléfonos inteligentes y las tablets por la noche”, concluye Green.