Un grupo de investigadores de la clínica Cleveland de Ohio, EEUU han demostrado que unos niveles más bajos de exposición a la luz durante el día están correlacionados con un peor estado de ánimo y más fatiga y dolor en los pacientes, en comparación con aquellos cuyas habitaciones están mejor iluminadas durante el día. El estudio sugiere que los pacientes en una habitación normal de hospital están expuestos a tan poca luz durante el día que sus cuerpos no pueden adoptar un ciclo normal de sueño -vigilia.
Estudio práctico en pacientes hospitalizados
Para ver si la luz podría desempeñar un papel en la curación de los pacientes del hospital Esther Bernhofer, autor principal del estudio e investigadora de Enfermería en el Instituto de Enfermería de la Clínica Cleveland, y sus colegas recogieron datos de 40 hombres y mujeres ingresados en un hospital universitario entre mayo de 2011 y abril de 2012. Los pacientes usaron un dispositivo de muñeca durante 72 horas para medir los patrones de sueño y vigilia y exposición a la luz, y completaron cuestionarios para evaluar su estado de ánimo y los niveles de dolor. Y al igual que ocurre a muchos pacientes en los hospitales, los que participaron en el estudio durmieron mal, con interrupciones frecuentes y un promedio de sólo cuatro horas de sueño por noche. Los pacientes que tuvieron una menor exposición a la luz durante el día, informaron tener un estado de ánimo más deprimido y estar más cansados que las personas expuestas a más luz.
Mínimo necesario de 1500 lux durante 15 minutos por día
En promedio, los pacientes del estudio fueron expuestos a sólo alrededor de 105 lux cuando de media la iluminación de oficinas proporciona cerca de 500 lux y un día soleado puede representar hasta 100.000 lux. Estudios anteriores han hallado que para establecer un ciclo normal de sueño -vigilia es necesario un mínimo de 1.500 lux durante 15 minutos por día, pero es preferible que la exposición sea de al menos 4000 lux a lo largo de ocho horas, según indica el equipo de Bernhofer el Journal of Advanced Nursing.
«Hasta ahora, nadie ha analizado la relación entre la luz y los estados como el sueño, el humor y el dolor experimentados en el hospital», apunta Bernhofer. «Este estudio sirve de base para probar futuras intervenciones de iluminación para mejorar los patrones de sueño y vigilia, el estado de ánimo y el dolor en adultos hospitalizados, pero tan solo constituye una base preliminar y no debería considerarse para modificar ningún protocolo ni intervención hospitalaria hasta que no se hayan realizado más pruebas e investigaciones especificas. Seguir en la senda de la investigación podría revelar nuevas formas más rentables para proporcionar terapia de apoyo para el sueño y el dolor – uno de los problemas más comunes que afectan a los pacientes hospitalizados y que influyen negativamente en su capacidad de sanación » añade la investigadora.