Un láser de última generación permite escanear las estructuras históricas y almacenar la información para que pueda ser vista en un futuro.
Foto de portada: La estructura de la Opera de Sidney capturada por el láser de CyArk.
Existen circunstancias que constituyen una verdadera amenaza para las obras de arte, la arquitectura y los monumentos, especialmente los que se encuentran a la intemperie. Puede ser por un elemento incontrolable como el clima extremo u otras desgracias naturales aunque también puede venir de la mano del hombre como está ocurriendo en la actualidad con los ataques terroristas que están acabando con las muestras de miles de años de historia.
En 2001, por ejemplo, los Talibán se deshicieron de 1.700 años de historia en segundos explosionando una antigua estatua de Buda en una región central de Afganistán, mientras en marzo 2015, ISIS destruyó cientos de piezas históricas en un museo de Iraq. Ahora la amenaza se cierne sobre las ruinas de la ciudad histórica de Palmira, en Siria.
Afortunadamente ante tanta impotencia y dolor, algo se puede hacer, y la organización sin ánimo de lucro CyArk, ha inventado un láser de última generación que permite escanear las estructuras históricas y almacenar la información. La idea es preservar los tesoros al menos en una versión digital de alta precisión para que siempre se puedan conocer.
El sistema ha sido ideado por el fundador de CyArk, el ingeniero de origen iraquí Ben Kacyra, nacido en Mosul, Iraq, en 1940 y residente en Estados Unidos desde 1964. Kacyra tuvo un papel decisivo en el diseño del primer escáner láser portátil en los 90.
En 2003 Kacyra fundó CyArkm, una compañía que se especializa en la preservación digital de arquitectura antigua e histórica, marcado por la voladura de una estatua de Buda por el Talibán y por el terremoto que devastó de Bam, en Irán, en 2003. “Si hubiera sido escaneada, nuestros hijos y nietos podrían tener la oportunidad de regresar y aprender un poco de la historia de este lugar”, relató Kacyra.
Desde 2003 Kacyra se ha dedicado a escanear el patrimonio de la humanidad, y tiene programados ya los próximos 5 años con 500 lugares incluidos bajo la denominación de Patrimonio Mundial de la Humanidad. Los lugares ya escaneados incluyen Tebas, en Egipto; Chichén Itzá, México; Fort Laramie, en EE.UU; el parque nacional de Mesa Verde en Colorado; el Monte Rushmore; Petra en Jordania; Pompeya, Rapa Nui, la Ópera de Sydney, Tikal, y su nativa Mosul.