Un estudio llevado a cabo por el prestigioso Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés) basado en el uso de luces LED parpadeantes, ha demostrado que se pueden reducir sustancialmente las placas de amiloide beta asociadas a la enfermedad de Alzheimer.
El tratamiento, a priori, resultaría poco invasivo y accesible aunque todavía se encuentra en fase incicial.
Según un estudio llevado a cabo por el Instituto Tecnológico de Massachusetts, el uso de luces LED parpadeantes a una frecuencia específica, pueden reducir sustancialmente las placas de amiloide beta observadas en la enfermedad de Alzheimer, tras experimentar en la corteza visual de ratones.
La enfermedad de Alzheimer se caracteriza por placas de amiloide beta, las cuales se sospecha pueden ser perjudiciales para las células y el funcionamiento del cerebro.
Los investigadores han descubierto que el tratamiento, el cual funciona a base de ondas cerebrales conocidas como oscilaciones gamma, ayuda al cerebro a suprimir la producción de amiloide beta cerebral y revitalizar las células responsables de destruir las placas.
Según ha manifestado Li-Huei Tsai, directora del Instituto Picower para el Aprendizaje y la Memoria del MIT y autora principal del estudio que aparece en la edición on-line de la revista Nature, todavía es necesario investigar más “para determinar si un enfoque similar podría ayudar a los pacientes de Alzheimer”.
El tratamiento se ha probado con éxito en ratones, y según Tsai, “si los seres humanos se comportan de manera similar a los ratones en respuesta a este tratamiento, yo diría que el potencial es enorme, porque no es tan invasivo y además bastante accesible».
Tsai y Ed Boyden, profesor asociado de ingeniería biológica y ciencias cerebrales y cognitivas del Laboratorio de Medios del MIT y el Instituto McGovern para la Investigación del Cerebro, y coautor del artículo publicado en Nature, han creado una empresa llamada Cognito Therapeutics para realizar pruebas en humanos según informa la página web del MIT.
Para Michael Sipser, decano de la Escuela de Ciencias del MIT, este anuncio puede suponer “un avance en la comprensión y el tratamiento de la enfermedad del Alzheimer, una aflicción terrible que afecta a millones de personas y sus familias en todo el mundo».
El laboratorio en el que trabaja Li-Huei Tsai está estudiando ahora si la luz puede conducir oscilaciones gamma en regiones del cerebro más allá de la corteza visual, y los datos preliminares sugieren que esto es posible. También están investigando si la reducción de las placas amiloides tiene algún efecto sobre los síntomas conductuales de sus modelos de ratones con Alzheimer, y si esta técnica podría afectar a otros trastornos neurológicos que implican deteriorados oscilaciones gamma.
Con este estudio los investigadores abren la puerta a una nueva línea de investigación sobre este trastorno cerebral y los mecanismos que pueden causar o prevenirlo.