Una experiencia interactiva de realidad virtual muestra espacios públicos subterráneos reimaginados y calles interactivas a través de la iluminación conectada.
Philips Lighting (Euronext Amsterdam: LIGHT), líder mundial en iluminación, ha creado una simulación de lo que podría ser la vida urbana en 2030, en una experiencia de realidad virtual vanguardista. En Smart Cities Expo World Congress en Barcelona, Philips Lighting Research ha dado a conocer cómo la tecnología de iluminación conectada desempeñará un papel clave en el desarrollo de las ciudades inteligentes que habitaremos en poco más de una década.
Distintos momentos de la visita al stand de Philips Lighting en SCEWC que levantó mucha expectación
Los núcleos urbanos están creciendo rápidamente y se prevé que el 60 por ciento de la población mundial vivirá en las ciudades en 2030. Philips Lighting está ayudando a allanar el camino para el crecimiento urbano desarrollando un plan centrado en las personas, a través de los servicios de iluminación basados en el Internet de Cosas (IoT) para la ciudad inteligente del futuro.
En la primera entrega de la experiencia de realidad virtual «2030: vida urbana inteligente», la compañía muestra cómo la iluminación LED conectada tiene el potencial de mejorar la calidad de vida, transformar experiencias y servicios cotidianos y garantizar la sostenibilidad en nuestras ciudades en constante expansión. Para el año 2030 se prevé que habrá cerca de 70 mil millones de puntos de luz.
La iluminación pública, clave en el intercambio de información con millones de dispositivos urbanos
La iluminación pública está presente en todas partes: en los lugares donde la gente vive, trabaja, juega y viaja. Su función principal es proporcionar luz de calidad para mejorar la seguridad pública y el paisaje urbano, sin renunciar a la eficiencia energética. Sin embargo, en el futuro, la infraestructura de iluminación también ofrecerá un enorme potencial para formar parte de una red urbana capaz de proporcionar información y servicios a millones de dispositivos, desde contenedores de basura a vehículos autónomos.
«Las necesidades y aspiraciones de los habitantes de las ciudades han cambiado. Accedemos a la información de manera inimaginable hace 30 años; este rápido ritmo de cambio se traducirá en una creciente demanda a los gobiernos de las ciudades», dijo Kees van der Klauw, Senior Vicepresident de Philips Lighting Research. «La tecnología tiene un papel importante que desempeñar para hacer las ciudades más habitables y ofrecer nuevos servicios a sus ciudadanos. A través de nuestros sistemas y servicios de iluminación conectados, Philips Lighting ya está poniendo en marcha muchos de los cimientos que permiten construir las ciudades inteligentes de mañana. Paralelamente, vemos que los ciudadanos no quieren que se les imponga una tecnología, quieren tener voz y participar en la definición de las aplicaciones que necesitan».
La visión de Philips Lighting sobre la ciudad de 2030 explora cuatro escenarios que demuestran cómo la futura tecnología de iluminación puede ofrecer ciudades más sostenibles, mejor conectadas y más agradables. Estos escenarios son:
1. Calles conectadas La iluminación urbana LED conectada no solo proporciona luz de alta eficiencia energética, también supone nodos de sensores en una autopista de información. En 2030 las luces de una calle conectada podrían transmitir datos entre millones de dispositivos. La infraestructura de iluminación conectada recopila y distribuye datos y mejora los servicios de la ciudad, como la luz, el tráfico, la calidad del aire, la seguridad pública, el estacionamiento y otros servicios basados en localización, aprovechando tecnologías de comunicación de vanguardia. Los vehículos autónomos navegan por las carreteras con seguridad, utilizando y comunicándose con sensores en las luces de las calles que exploran la carretera y los pavimentos y proporcionan un marco de referencia mediante la transmisión de información de situación con los sensores a bordo de los vehículos.
Philips Lighting anuncia uno de los proyectos de iluminación conectada más grandes del mundo en Yakarta, donde el sistema Philips CityTouch controla casi 90.000 farolas en las calles de la ciudad.
2. Espacios públicos interactivos La escasez de espacio obligará a las ciudades a extender los espacios públicos subterráneamente, pero la gente se sentirá cómoda gracias a la iluminación que imita la luz natural. Los sistemas de iluminación digital pueden enviar datos de posición para ayudar a los drones a navegar y entregar artículos, mientras que las superficies luminosas pueden exhibir arte y fomentar la interacción y la creatividad de los ciudadanos.
Philips Lighting presentó un nuevo sistema de iluminación conectado: Philips Power over Ethernet (PoE) que transforma el emblemático rascacielos Torre Europa de Madrid en una oficina inteligente.
3. Agricultura urbana sostenible Debajo de la ciudad y en los espacios no utilizados, granjas urbanas pueden cultivar plantas y verduras de forma sostenible, reduciendo la distancia entre el campo y la mesa, aumentando la seguridad alimentaria, asegurando la procedencia y protegiendo los recursos naturales.
Desde 2013, Philips Lighting colabora con GrowUp Urban Farms, una granja urbana vertical establecida en un almacén no utilizado en el área industrial de East London. Esta es la primera granja urbana acuaponic comercial en el Reino Unido y produce 20.000 kilogramos de ensaladas frescas por año con la ayuda de la iluminación de Philips GreenPower LED.
4. Estilos de vida personalizados En la casa de 2030, la iluminación será capaz de sincronizar con todo, desde el timbre de la puerta hasta la televisión y la música y será ajustable a las preferencias individuales. Se anticiparán a las necesidades y complementara el bienestar y la seguridad.
En noviembre, Philips Lighting y Xiaomi unieron sus fuerzas para diseñar y desarrollar productos de iluminación LED conectados para el ecosistema doméstico inteligente de Xiaomi en China.
Jeff Cassis, Head of Government Business de Philips Lighting, explicó: «El crecimiento urbano sostenible debe equilibrar las crecientes demandas de recursos, espacio y seguridad, con la habitabilidad y bienestar para los ciudadanos. Los administradores tendrán que dar prioridad a los cambios que son más importantes, no solo en función de coste, viabilidad y oportunidad, sino también por escuchar las necesidades y deseos actuales de los ciudadanos”.
«El futuro de las ciudades inteligentes es la suma de muchas partes y el éxito requerirá la colaboración entre empresas grandes y pequeñas, gobiernos, universidades y, sobre todo, los ciudadanos. Por eso hoy, estamos llamando a los ciudadanos y gestores de ciudades de todo el mundo a unirse a nuestra conversación y explorar el futuro juntos. El futuro comienza ahora».