Sisoft de México tiene dos patentes sobre su Tecnología LED Comunication (LC) de transmisión de datos a través del espectro de luz mediante el uso de LED. Según la empresa, el proceso de registrar una patente en México tanto en fondo, forma como en costes es muy exigente pero no imposible.
En foto de portada, el equipo de Sisoft México dedicado a tecnología Li-Fi
Los inventores se enfrentan a muchos obstáculos en su larga carrera hacia la meta de ver un invento integrado en la vida de las personas. En este sentido, Arturo Campos Fentanes, director General de Sisoft de México explica: “Cuando por fin terminaste y comprobaste tu invención, el proceso de registro de la misma es un camino largo y costoso en México, situación que vuelve inaccesible para muchos obtener un título de patente”. Para Campos, se deberían facilitar las cosas a los inventores en aras al progreso de la humanidad y a aumentar la motivación de investigadores, según explica, “El registro de una patente debería de ser sencillo, para que motive a las personas y se tenga un registro efectivo del verdadero invento o inventores, con el propósito de evitar el robo de ideas pero permitiendo que éstas sean públicas para que sean la base de mejoras de la vida humana”, añadió el directivo. Por lo tanto son muchos los beneficiados según Campos, tanto el inventor al concedérsele la titularidad exclusiva para explotar la invención por 20 años como la humanidad.
En Sisoft de México, según explica Campos el proceso de registro se inicia en las fases muy iniciales del proyecto: “para Sisoft de México, siempre ha sido primordial los registros de marca y ahora de patentes, somos una gran fábrica de ideas, en constante labor, así que en cuanto logramos resultados con alguna idea y comprobamos su utilidad, de inmediato comenzamos a trabajar en el registro de la patente, porque detrás de ella, hay mucho trabajo de desarrollo e investigación. Así que no sólo buscamos una patente por la novedad de los resultados obtenidos, sino por el gran compromiso que tenemos con el equipo de trabajo, de transmitir todo el conocimiento y demostrar que el conocimiento no tiene límites”. Y es que en definitiva, una patente constituye un incentivo para las personas, un reconocimiento por su creatividad y recompensas materiales por sus invenciones comercializables, y estos alientan la innovación como explica el ejecutivo. “Las invenciones patentadas han invadido todos los aspectos de la vida humana, por lo que todos los titulares de patentes deben, a cambio de la protección de la patente, publicar información sobre su invención, con la finalidad de enriquecer el conocimiento técnico del mundo, y de promover la creatividad e innovación en otras personas, siendo esta información e inspiración valiosa para las futuras generaciones de investigadores e inventores”.
Tres obstáculos al registrar una patente en Mexica
- De forma: hay que cumplir con un estricto formato que marca tanto el tipo de hoja, gramaje, márgenes y muchos detalles.
- De fondo: es necesario ser muy claro en el alcance de lo que se registra, señalar punto a punto qué es lo que se está protegiendo. El proceso se puede realizar a través de terceros como un despacho de especialistas, lo que resulta más fácil, pero más costoso o por cuenta propia lo que necesita mucha asesoría y dar varias vueltas.
- Costos: teniendo en cuenta que en la etapa de registro de una patente, aún no hay explotación de la misma, desde los inicios conviene asignar una partida presupuestaria para ello y más cuando el registro es en varios países. Las tasas de cada país varían mucho.
En México, el proceso tarda mucho tiempo ya que no es hasta pasados unos 30 meses en que por fin si todo va bien se otorga el sello que acredita como propietario de su invento. “A pesar de que los requisitos para el registro de una patente, varían de un país a otro, México es uno de los países que no facilita el camino con tanto requisito de fondo y de forma. A pesar de esto, invito a todos los inventores a seguir el procedimiento”, concluyó Campos.
La Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), es el organismo especializado de las Naciones Unidas ante el cual se solicita una patente y cuya misión es fomentar la protección de la propiedad intelectual en todo el mundo mediante la cooperación internacional. El registro de una patente se define como la protección de una invención [producto o proceso] y de su uso o explotación exclusiva por un período limitado de tiempo [20 años]. Según los Indicadores mundiales de propiedad intelectual en 2012 se registraron 2.350.000 solicitudes/patentes, lo que supuso un crecimiento del 9,2% con respecto a 2011, el mayor aumento en 18 años. La distribución por regiones en 2012 fue Asia: 55,9%; América del Norte: 24,6%; Europa: 14,7%; América Latina y El Caribe: 2,7%; Oceanía: 1,4%; y África: 0,6%.