La digitalización está cambiando rápidamente tanto la forma en la que vivimos como en la que hacemos negocios. Estamos inmersos en un momento de cambio y las empresas deben iniciar un proceso de transformación que requiere un importante esfuerzo inversor en innovación y nuevas tecnologías. Porque las empresas que no lleven a cabo este proceso están abocadas a desaparecer en los próximos años. Para que esto no suceda, las empresas españolas, europeas y de todo el mundo deben aumentar su capacidad de innovación para poder competir en este nuevo mundo hiperconectado en el que vivimos. Pero en la mayoría de los casos, los costes son una de las principales razones para no invertir.
En el caso de la robótica y la inteligencia artificial las posibilidades de aplicación y el potencial de desarrollo son tan importantes que no podemos dejar escapar las oportunidades que ofrece para ganar competitividad. Y es que, Europa está a la vanguardia en este sector, y tanto EE. UU. como China, las principales naciones industrializadas, han identificado la robótica y la inteligencia artificial (AI) como prioridades tanto económicas como estratégicas.
En España, según los últimos datos del informe anual de Robótica Industrial de 2017, el número de unidades totales instaladas en España asciende a 3.221, lo que significa una disminución del 13% en relación con el año anterior. Y por sectores, el 48% de los robots se aplican a la automoción en nuestro país, seguido por el sector del metal con un 19% y de la alimentación y bebidas con un 13%.
Conscientes de la necesidad de impulsar este sector y para ayudar a las empresas españolas a garantizar su futuro con la inversión en innovación y nuevas tecnologías, Siemens cuenta con su división Siemens Financial Services (SFS) que apoya las inversiones relacionadas con la tecnología ofreciendo financiación de proyectos, equipos y soluciones de arrendamiento, financiación estructurada, préstamos de capital y servicios de asesoramiento personalizados.
La compañía aplica lo que denomina Financiación 4.0, un tipo de sistema de financiación flexible que permite a las empresas invertir de forma sostenible en la tecnología de la cuarta generación y en equipos de automatización para mejorar su competitividad. La compañía ha detectado el gran potencial de la digitalización en áreas como la industria robótica y aplica estos sistemas de financiación adecuándolos a cada sector para responder a sus necesidades específicas, con el objetivo de facilitar la inversión en innovación para que las empresas puedan beneficiarse de las ventajas de la digitalización.
Las grandes oportunidades de la robótica
Los avances en digitalización están transformando la industria de la robótica. Aunque tradicionalmente los robots se han implementado en el proceso de fabricación industrial, los nuevos tipos de robots, como los robots de asistencia personal o de consumo y los vehículos aéreos no tripulados (UAV), se están demandando cada vez más junto a los vehículos autónomos – otro tipo de robots-. De hecho, se espera que, en 2022, el mercado mundial de la robótica llegue a 237 mil millones de dólares, más de siete veces el valor alcanzado en 2016 ($31 mil millones).
La robótica y la inteligencia artificial (IA) ya están impulsando la innovación en muchos sectores, como salud, manufactura, transporte, industria aeroespacial, petróleo y gas. Pero en la asistencia sanitaria, por ejemplo, el uso de la robótica se está convirtiendo en un área de desarrollo extremadamente importante. Concretamente, Reino Unido cuenta con empresas de robótica pioneras en el desarrollo de miembros biónicos, que actualmente utiliza el escaneado e impresión en 3D para crear manos biónicas avanzadas, livianas y de bajo coste. Una gran revolución que necesita de mayor inversión para continuar adelante. Porque para poder continuar avanzando y aprovechando las oportunidades de la robótica en este y otros sectores es fundamental contar con inversión en innovación.
En este sentido, contar con los acuerdos de Financiación 4.0 como los que ofrecen proveedores especializados en tecnología, como es el caso de Siemens Financial Services, cobran especial protagonismo. Ya que disponer de acuerdos financieros con empresas tecnológicas conocedoras del negocio proporciona un importante valor añadido a las empresas, ya que no sólo saben cómo funciona la tecnología digital, sino que también tienen como objetivo sacarle el máximo beneficio.
Las posibilidades en este terreno son muchas, pero, sin embargo, mantener el ritmo de los avances tecnológicos requiere un considerable gasto de capital. En este contexto, cada vez más fabricantes recurren a una gama de técnicas de financiación inteligentes como la Financiación 4.0, que les ayuda a invertir de forma sostenible. Este tipo de financiación cubre una amplia gama de requisitos, desde la adquisición de un único equipo digitalizado hasta la financiación de un nuevo proceso farmacéutico.
Con la Financiación 4.0 estamos ante el surgimiento de una nueva generación de tecnología digitalizada que vincula personas, tecnología y organizaciones. Lo que ha permitido alinear la inversión de las organizaciones privadas o públicas con los beneficios empresariales esperados. De esta forma, las finanzas y la tecnología se combinan en una propuesta de valor integrada donde el proveedor de soluciones ofrece a las organizaciones la posibilidad de pagar los resultados empresariales esperados, como mejoras de productividad, tiempo de actividad optimizado, ganancias de rendimiento precisas, reducción de costes o uso de energía reducido.
Los sistemas financieros especializados que ofrece Siemens Financial Services son capaces de crear paquetes de financiación personalizados que se ajustan a los requisitos específicos de una empresa de un determinado sector, ya que puede desde flexibilizar el período de financiación hasta adaptarse al flujo de efectivo del cliente, en contraposición a la financiación tradicional.