Autor: Departamento de Marketing de Schréder Spain
En un mundo donde las sociedades están, cada vez más, implicadas con la sostenibilidad, las ciudades tienen también una importante vida nocturna, cuando es importante que puedan seguir mostrando su identidad, En este momento es cuando la iluminación se convierte en mucho más que una necesidad funcional, no sólo alumbra, sino que define espacios, marca rutas y provoca emociones.
En este contexto, en Schréder nos hemos posicionado como uno de los referentes en soluciones decorativas de iluminación arquitectónica, así como en sistemas de control inteligentes que permiten adaptar la luz al uso, al entorno, y a los ciudadanos.
En este artículo revisamos nuestros esfuerzos decorativos, innovaciones en control y nuestra estrategia centrada en el diseño y la sostenibilidad, además, concluimos con dos ejemplos de proyectos nacionales: el Halo de Vigo y la reciente renovación luminosa del Puente del Tercer Milenio en Zaragoza.
La iluminación decorativa y su identidad, estética y adaptabilidad
La iluminación decorativa debe ir más allá de lo simplemente práctico, tiene que tratar de mejorar el entorno, dándole un carácter único a los espacios públicos, plazas, paseos y monumentos de cada comunidad.
Con este tipo de iluminación, los ciudadanos deben sentirse identificados y cómodos, tanto con los niveles de luz, como con su apartado estético. Luminarias ornamentales, tiras LED, proyectores en fachadas, columnas decorativas, todos estos elementos pueden convertirse en seña de identidad de una ciudad.
En Schréder contamos con una gran variedad de familias para iluminación decorativa, todas ellas orientadas a un diseño decorativo, si perder su calidad, es decir, la clave es conseguir aunar la estética con la tecnología de vanguardia. Algunas de nuestras luminarias dentro de esta gama son YOA, VALENTINO LED, FLEXIA o CITRINE, todas ellas con diferentes estilos. También destacan otros modelos como el farol VALENTINO, un buen ejemplo de luminaria clásica redefinida.
La luminaria decorativa ya no es solo cuestión de su estética, el material, la durabilidad, la eficiencia energética importan y no deben descuidarse, ni reducirse en lo más mínimo en comparación con el resto de las gamas.
Como hemos dicho al principio, vivimos en un mundo dónde la sostenibilidad debe ser la pieza fundamental donde se apoyen el resto, en Schréder la tenemos como parte principal de nuestra estrategia. Por ello, la reducción del consumo, el bajo mantenimiento, la elección de ópticas que minimicen contaminación lumínica y los acabados resistentes, son elementos que integramos y cuidamos al máximo, también en nuestros productos decorativos.
Reuniendo todos los elementos, eficiencia, sostenibilidad, buena calidad de iluminación, decoración, estética, adaptabilidad, etc. es vital tener una herramienta que permita a los responsables de las comunidades adaptar la iluminación para cada tipo de situaciones. Para ello, contamos con nuestros sistemas de control inteligente, que permiten adaptar los niveles luminosos a la hora del día, al tránsito, al uso, al clima, reducir el consumo energético adaptando la iluminación a la necesaria en cada momento, prolongar la vida útil de los equipos eléctricos y luminarias, reducir impacto ambiental, incluyendo contaminación lumínica y generar ambientes dinámicos: escenarios de iluminación para eventos, festividades, etc.
Dentro de todos los sistemas de control que ofrecemos en Schréder, el que más destaca es Schréder EXEDRA. Se trata de un sistema de gestión de iluminación inteligente que permite supervisión, monitorización, análisis de datos, creación de escenarios, automatización y muchas más funciones, pensadas para maximizar la eficiencia de las instalaciones, tanto a nivel confort y estética, como de ahorro y sostenibilidad Con EXEDRA los técnicos responsables de cada instalación podrán controlar la iluminación en todo momento, tanto en tiempo real, como con escenarios predefinidos, esto les permitirá aportar la luz adecuada y necesaria, en cada momento.
Además, está diseñado para interoperabilidad, con protocolos abiertos y compatibilidad con otros sistemas (sensores y controladores de terceros). De este modo, la iluminación podrá ir mucho más allá, adaptándose a eventos, fechas importantes, edificios arquitectónicos y las necesidades de cada momento, pero también a factores externos, como el tráfico o el clima.
Por otro lado, en Schréder también contamos con otro tipo de controladores inteligentes como sensores (PIR, fotoeléctricos, etc.) y drivers regulables, que permiten ajustar automáticamente el nivel de iluminación según factores como la presencia de personas, el nivel de luz natura, el clima, las estaciones del año, etc.
De lo teórico a lo práctico: casos de éxito reales
Para ver cómo se aplican estos elementos en la práctica, vamos a mostraros dos proyectos recientes en España en los que se aunaron iluminación decorativa y control dinámico, con resultados estéticos, funcionales y sostenibles.
El Halo de Vigo
El Halo de Vigo es una estructura circular de 50 metros de diámetro, con unos 6 metros de ancho para el paso peatonal, elevada sobre el suelo unos 50 metros, que conecta la calle García Barbón con Vía Norte mediante dos ascensores, formando parte del proyecto “Vigo Vertical”.
Se trata de una estructura arquitectónica icónica para la ciudad de Vigo, que redefine la movilidad urbana y le otorga un atractivo turístico y recreativo enorme al municipio.
Para llevar a cabo el proyecto suministramos 216 luminarias SCULPline RGBW, además de tiras LED RGBW para detalles interiores como barandillas, y los equipos de control dinámico de luz. Este sistema de control permite variar el color, intensidad y efectos de la iluminación según la hora, evento o actividad especial del municipio. Además, se puede generar una paleta de colores muy variada tanto para iluminaciones fijas como para animaciones lumínicas.
El fin era que el Halo no solo se viera, sino que viviese: que se pudieran cambiar colores, adaptarse al ambiente, generar efectos según eventos, hora, etc.
Como resultado del proyecto, más de 25.000 personas disfrutaron del Halo en su primer fin de semana y ya ha superado ya los 4,5 millones de usuarios, con una media diaria de 13.000 personas, consolidándose como una infraestructura clave en la movilidad urbana.
Además de su función arquitectónica de conectar zonas de la ciudad, se ha convertido en un punto de atracción, un símbolo moderno, una obra referente a nivel europeo de iluminación urbana decorativa con control dinámico. Prueba de ello son los galardones obtenidos, entre ellos The Architecture MasterPrize y un accésit en los Premios Acueducto de Segovia, que destacan su innovación, integración urbana y aportación al paisaje contemporáneo.
El Puente del Tercer Milenio, Zaragoza
El Puente del Tercer Milenio, diseñado por el ingeniero Juan José Arenas de Pablo y construido para la Expo 2008, es un puente de arco atirantado de hormigón blanco, con una luz de arco de 216 metros, un tablero de 270 metros de longitud, anchura de 43 m y varios carriles de tráfico, aceras y carriles bici. Es un icono arquitectónico de la ciudad.
El Ayuntamiento de Zaragoza comenzó un plan para revitalizar símbolos arquitectónicos de la Expo de 2008. Como parte de esta estrategia, buscaron darle un lavado de cara al puente del Tercer Milenio añadiéndole un innovador sistema de iluminación ornamental inteligente.
Con este motivo, en Schréder llevamos a cabo un nuevo sistema de iluminación para el puente formado por 110 VALINTA MIDI, que cuentan con una paleta cromática altamente versátil, lo que permite a la ciudad ambientar el puente según eventos o fechas especiales. Nuestras VALINTA utilizan el hormigón blanco como lienzo para poder iluminar el puente de forma más eficiente y agradable.
Por el momento se han programado 57 escenas diferentes, entre las que se encuentran las destinadas a algunos días señalados del calendario, como el día de San Valero, patrón de la ciudad, el día de Europa o las banderas autonómica y nacional.
Con este nuevo proyecto, el ayuntamiento de la ciudad buscaba convertir la estructura en algo más que un mero elemento de utilidad arquitectónica, buscaba ir un paso más allá, creando una experiencia sensorial y cultural de primer orden para los ciudadanos y visitantes.
Además, como hemos dicho antes, la iluminación decorativa, no debe ser un obstáculo para la sostenibilidad, ni debe estar reñida con una iluminación eficiente y de calidad. De este modo, con este proyecto, se conseguirá un ahorro energético para la ciudad del 93% anual con respecto a la anterior, es decir, a una reducción de unos 19 745 kWh al año y evitará la emisión de 6,5 toneladas de CO₂. Como en todos nuestros proyectos, la sostenibilidad siempre es el eje principal sobre el que nos apoyamos.
Imágenes: Schréder