Imagínate que estás tan tranquilo en casa y recibes una llamada de tu madre. Como ya tiene una edad, de vez en cuando necesita una ayudita con algunas cosas de las que tú haces a diario por Internet. En esta ocasión no te llama para pedirte que le ayudes a entrar en su perfil de Facebook, sino para que le ayudes a entrar a la web de su banco para hacerle una transferencia a tu hermano pequeño. Al parecer ha olvidado la contraseña y no es capaz de recordarla.
Hasta aquí, toda esta situación podría ser algo cotidiano, salvo por un ‘pequeño-gran’ detalle. La que te ha llamado no era tu madre, sino una voz generada y sintetizada por computadora para imitar a la perfección su voz. Asimismo, este ordenador se sirve de unos complejísimos algoritmos de Inteligencia Artificial para que, no sólo suene como la voz tu madre, además se expresa con una fluidez y elocuencia que jamás pensarías que quien está hablando no es un ser humano.
Potenciales peligros
No te eches a temblar. Toda esta hipotética situación que te hemos propuesto imaginar, aún no es posible al 100%. Eso sí, en breve sí podría ocurrir. Aunque al software del que acabamos de hablar todavía le quedan unas cuantas líneas de código para que un ordenador sea capaz de hacerte creer que es tu madre, ya hay bastantes diseñadores de videojuegos que presumen de que su software imita tan bien a un ser humano que han reducido a la mitad las plantillas de dobladores de sus juegos, sustituyéndolos por máquinas.
Es más, la Inteligencia Artificial supone un avance exponencial en la comodidad de las personas, ya que las máquinas son, cada vez más, más capaces de aprender y de realizar tareas. Entre otras cosas, por medio de la Inteligencia Artificial, también se podrán mejorar las técnicas de reconocimiento de los patrones que utilizan los ciberdelincuentes, con lo que las computadoras podrán detectar a los hackers todavía más rápido que las personas.
Los crímenes del futuro
No obstante, gran parte de los crímenes del futuro serán muy parecidos a la escena que acabamos de relatar. De hecho, “los delitos cibernéticos se están automatizando y su número está escalando exponencialmente“, señala Hervé Lambert, Consumer Operations Manager en Panda Security.
En los últimos años el malware ha evolucionado tanto, que se han dado casos como el de Blackshades, un virus a modo de franquicia del mal. Este sistema de Inteligencia Artificial diseñado por un hacker sueco se instaló en lo más profundo de los sistemas operativos de miles de ordenadores. A su vez, el ciberdelincuente creó un programa que cualquiera se podía descargar para gestionar el virus y, de este modo, conectarse a los micros y web cams de esos miles de ordenadores, para espiar a sus dueños, e incluso poder secuestrar sus equipos a cambio del pago de un rescate. Todo, a un solo click de ratón.
Máquinas de Vision Artificial
Los algoritmos de Inteligencia Artificial tienen tal potencial de desarrollo y de mejora, que las máquinas empiezan a tener Visión Artificial. Es decir, ya son capaces de interpretar qué hay en una imagen y saber si lo que hay en una foto es un cuadro de Goya, el logotipo de una marca o una imagen del presidente del Gobierno. Si usas asiduamente Google Images habrás visto que hay una opción que permite buscar imágenes subiendo archivos o haciendo una foto con tu teléfono móvil, en vez de tener que buscarlas escribiendo un texto. Esto es también Inteligencia artificial.
Reconocimiento de tarjetas de crédito
Otro caso de visión artificial que cada vez vemos más a menudo es el reconocimiento de tarjetas de crédito que utilizan Amazon y muchos bancos. Esta tecnología se usa, principalmente, para que no tengamos que escribir los datos de nuestra tarjeta de crédito, pues con poner la tarjeta delante del teléfono, la aplicación de la tienda online ya sabe que se trata de tu tarjeta
Reconocimiento de “Captcha”
La cara negativa de la Visión Artificial viene con el uso malicioso que puedan darle los hackers. De hecho, los ciberdelincuentes llevan bastante tiempo estudiando cómo engañar a los omnipresentes “Captcha”, esos códigos de números escritos de una forma extraña que te piden muchas webs para confirmar que eres una persona y no un código malicioso. “Por ello, es muy recomendable que las webs que usen la tecnología Captcha actualicen el software de una forma muy frecuente, ya que si no lo cambias en uno o dos años, es casi seguro que serás hackeado por algún tipo de algoritmo de Visión Artificial“, añade Hervé Lambert.
Tecnología de reconocimiento de voz
Y lo mismo pasa con los sistemas de la comprensión del habla, la síntesis del habla y la comprensión del lenguaje natural. Cada vez los usamos más y cada vez nos ayudan más en nuestros quehaceres diarios. Sin embargo, los criminales, podrán aprovechar los nuevos desarrollos que se den en el campo de la Inteligencia Artificial.
De este modo, la tecnología de reconocimiento de voz, como “Siri” de Apple y “Cortana” de Microsoft, ya forman parte de nuestro día a día para que interactuemos con nuestros dispositivos mientras conducimos, o cuando tenemos las manos ocupadas. Asimismo, el altavoz controlado por voz “Echo” de Amazon y la plataforma “Messengerbot Messenger” de Facebook avanzan a una velocidad de vértigo para mejorar nuestras experiencias de compra online y de atención al cliente.
Aunque poco probable, es posible que se diseñen algoritmos de Inteligencia Artificial para engañar a este tipo de tecnologías por medio de software capaz de imitar el habla y las expresiones propias de las personas, tal y como relatábamos al principio de este post.
El futuro de la Inteligencia Artificial
“La Inteligencia Artificial se va a convertir más pronto que tarde en una realidad del día a día de la mayoría de las personas de este planeta. Por ello, es imprescindible que su desarrollo se lleve a cabo de una manera responsable, dando pasos poco a poco y pensando siempre en adelantarse a posibles brechas de seguridad”, finaliza Hervé Lambert, Consumer Operations Manager en Panda Security.