La iluminación en espacios artísticos es un factor clave que permite crear atmósferas especiales o efectos únicos a través de la manipulación de la luz, las sombras y el color. A menudo restricciones de espacio y las necesidades de integración obligan a los diseñadores a buscar en los elementos de iluminación además de unas cualidades lumínicas determinadas, unas dimensiones acordes al espacio. Una de las ventajas del nuevo modelo Beacon Minor que la marca Concord de Havells-Sylvania ha presentado a la industria, es que no requiere drivers de LED para funcionar. Esta característica lo convierte en el primer proyector LED del mercado con conexión directa a la red.
Fácil instalación y gran compatibilidad
Según Eduardo Fuentes, Country Manager de Havells-Sylvania Spain «los dos principales inconvenientes a la hora de decidirnos por una solución de iluminación concreta son los problemas de compatibilidad y de facilidad de instalación». La luminaria Beacon Minor es de muy fácil instalación al no requerir un driver externo, se conecta directamente a una línea de tensión de 200-240V. Además su composición sencilla de carcasa, brazo accesorio y adaptador de carril no hacen necesario ningún tipo de engranajes adicionales.
Fuentes también añade «Beacon Minor es un ejemplo más de la experiencia de la marca Concord, conocida por el desarrollo de soluciones de iluminación arquitectónica de alta gama que superan los límites tecnológicos».
Mayor amplitud de aplicaciones
La combinación de un tamaño compacto, con buen rendimiento lumínico, ahorro de energía y mínimos costes de mantenimiento, amplía el número de aplicaciones en que su uso es indicado. Entre éstas destacan la iluminación de espacios comerciales, en recepciones y zonas de exposición.
La Concord Beacon Minor de 13W es equivalente a la lámpara dicroica de bajo voltaje de 50W y está disponible en dos versiones de 3.000K de 594 lm y de 623 lm, y en los colores blanco y negro