El Ayuntamiento de Pamplona, a través del programa Smart Iruña Lab, ha seleccionado los seis proyectos tecnológicos que se van a desarrollar en la ciudad durante el primer semestre de 2019. Se trata de ensayar nuevas tecnologías y soluciones Smart City que mejoren la calidad de vida de la ciudadanía promueva el desarrollo económico y social de Pamplona.
Luminarias LED para mejorar la seguridad vial, sensores en las farolas para ahorro y eficiencia energética, soluciones para la alerta temprana de plagas en parques urbanos, sensores para monitorizar el tráfico de forma inteligente, soluciones tecnológicas para un riego inteligente o la monitorización continuada de la calidad del aire en el interior de los edificios son las seis propuestas seleccionadas que se van a desarrollar en forma de proyecto piloto.
La presentación de los proyectos se ha llevado a cabo el pasado martes 11 de diciembre en el Palacio del Condestable, en un acto en el que han estado presentes el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, el concejal delegado de Transparencia, Innovación y Política Lingüística, Aritz Romeo, y el director del área, Arturo Ferrer. Smart Iruña Lab pretende convertir la ciudad en un laboratorio urbano para que personas emprendedoras y empresas puedan testar y probar sus propuestas y soluciones tecnológicas.
Programa Smart Iruña Lab
El programa ha recibido un total de 18 propuestas de soluciones Smart City en esta convocatoria, propuestas con interés en poder ser ensayadas y puestas en marcha en forma de proyecto piloto real. Esas 18 soluciones proceden de 16 grupos de personas emprendedoras, investigadoras, startups o empresas. En este sentido, 13 de las propuestas proceden de empresas constituidas y en 5 aún no se ha creado la empresa, si bien existe intención de hacerlo en caso de demostrarse viabilidad técnica y económica de las respectivas soluciones. En cuanto al origen geográfico, 6 provienen de Pamplona, un total de 15 de Navarra, y 3 de fuera de la Comunidad Foral (Vigo, Valencia y Barcelona). En lo que respecta a la temática, 7 tienen que ver con cuestiones medioambientales, 4 sobre movilidad sostenible, 4 se integran en planteamientos en los campos social-turismo-ocio-comercio y otras 4 sobre eficiencia energética y educación.
Una vez recibidas las propuestas, un Comité de Selección de Proyectos, creado de forma específica, las ha analizado y ha seleccionado las seis propuestas presentadas esta mañana. Para realizar esa selección han tenido en cuenta una serie de criterios de valoración: origen del proyecto (una o varias personas emprendedoras, empresas); ámbito tecnológico y de usabilidad de la solución Smart City propuesta; estadio de desarrollo de la solución propuesta; si soluciona un problema real; la escalabilidad de la solución y eficiencia de costes; y el impacto que la puesta en marcha del proyecto piloto pueda tener en la ciudad y en las personas o empresas promotoras.
Soluciones Smart City seleccionadas
STOPLED es un proyecto en el campo de la seguridad vial, basado en luminarias LED que se colocan en las aceras y salidas de garajes públicos o privados para advertir a peatones y otros protagonistas de la movilidad de la apertura o cierre inminente de las puertas por la presencia de un vehículo. Se puede colocar también en pasos de peatones con o sin semáforo para reforzar la seguridad vial.
SMART ROAD CITY busca la eficiencia energética con sensores en las farolas de la ciudad que puedan regular la luminosidad de una calle peatonal o abierta al tráfico. Se pueden conseguir ahorros del 30% o 40%.
URAD se encuadra en la movilidad sostenible, con sensores radar que monitorizan de forma inteligente el tráfico de todo tipo de vehículos y personas que transitan por un determinado lugar. Los conteos y estadísticas, con información incluso en tiempo real, se pueden utilizar para la mejora de esa movilidad urbana.
AGROPESTALERT plantea una solución a modo de alerta temprana de plagas que afectan a cultivos, a través de trampas inteligentes que detectan esa problemática identificando a los insectos mediante su carácter biométrico.
SMART AQUA propone soluciones para riego inteligente, con ahorros que alcanzan el 50%. Se calibra el tipo de suelo y el cultivo y mediante un algoritmo se pauta para regar cuándo y cuánto se necesite.
INBIOT busca la monitorización continuada de los parámetros que caracterizan la calidad del aire en el interior de edificios. A través de sensores específicos, algoritmos y una plataforma de acceso en tiempo real basados en la inteligencia de su base de datos se pueden mejorar la calidad del aire.
Durante esta segunda quincena del mes de diciembre se va a trabajar con cada una de las soluciones tecnológicas seleccionados para definir y acotar los proyectos piloto, que se desarrollarán durante el primer semestre de 2019 en lugares concretos de la ciudad.