Si bien parece haber pocas dudas de que la urbanización global continuará creciendo, está igualmente claro que los modelos actuales de vida urbana e infraestructura necesitan una revisión para incorporar conceptos relacionados con la sostenibilidad, resiliencia y habitabilidad. Según la firma global de inteligencia tecnológica ABI Research, las inversiones en infraestructura urbana destinadas a implementar nuevas visiones para las ciudades alcanzarán los 375.000 millones dólares para 2030.
“El concepto mismo de ciudad cambiará de forma profunda y estructuralmente”, afirma Dominique Bonte, vicepresidente de Mercados Finales y Verticales de ABI Research. En 2021, se han anunciado iniciativas urbanas realmente llamativas como The Line y Telosa, proponiendo nuevos modelos para la vida en la ciudad, basados en la movilidad a la carta, el comercio minorista, la asistencia sanitaria y robots de reparto, a la vez que se trasladan las actuales capas de transporte, energía y servicios públicos a niveles subterráneos.
“Aunque muchas de estas nuevas visiones de la ciudad no lleguen a ver la luz del día, ofrecer una visión de un futuro urbano más humanizado, sostenible y resiliente, gran parte del cual se llevará a cabo mediante la readaptación o la mejora gradual de las infraestructuras urbanas existentes en las próximas décadas”, explica Bonte.
Los motores de la innovación urbana son numerosos, pero tanto la digitalización de los estilos de vida, acelerado por el COVID-19, como la necesidad cada vez más apremiante de hacer frente al cambio climático son poderosos motores para la transformación de la ciudad. Otros agentes de cambio son la exigencia de una mayor equidad e inclusión, así como un desarrollo económico escalable.
Si bien los aspectos más visibles de esta revolución urbana están relacionados con los activos físicos, que van desde las infraestructuras verdes, espacios urbanos adaptables o edificios modulares, las invisibles capas digitales y sus procesos asociados son igualmente importantes. Estos serán proporcionados por empresas de innovación urbana como Alphabet’s Sidewalk Labs y Dassault Systèmes que desarrollan e integran sensores conectados, plataformas de gestión de software, gemelos digitales, blockchain, electrificación y automatización de procesos. Estas soluciones transformadoras permiten prácticas de mantenimiento preventivo y remoto, respuesta automatizada a emergencias y gestión del tráfico, y en última instancia realizarán la ciudad autónoma del futuro.
Estas conclusiones provienen del informe de investigación “Future Urbanization Concepts” de ABI Research, el cual presenta un análisis en profundidad sobre las tendencias del mercado y los principales impulsores y prioridades subyacentes a las estrategias de innovación urbana.
Fuente de imágenes: Neom, The Line