En este imparable avance hacia un modelo de movilidad sostenible, la importancia de los sistemas de iluminación en los vehículos está fuera de toda duda. Si al circular con nuestro coche la visión es defectuosa, estaremos aumentando en gran medida las posibilidades de sufrir un accidente.
Es por ello que resulta fundamental que, al circular con un vehículo por la noche o bajo condiciones meteorológicas adversas, este tenga un sistema de iluminación óptimo que minimice el riesgo al volante
La iluminación en los automóviles ha avanzado de forma considerable, sobre todo, en los últimos años. Muy lejanos en el tiempo quedan ya los faroles de carburo, petróleo o aceite de los primeros vehículos. Ahora la revolución llega de la mano de la tecnología LED y los faros inteligentes. De hecho, cada vez es más frecuente escuchar términos como luces de xenón, bi-xenón o de LED. Y es que resulta raro que un vehículo nuevo no ofrezca alguno de estos nuevos sistemas, pese a que al inicio de la producción solo los modelos de gama alta lo incorporaban en su equipamiento. Por tanto, si alguna vez te has hecho la pregunta: y si vendo mi coche. La cuantía que podrías conseguir sería mayor si tu vehículo cuenta con un equipamiento moderno.
El avance en esta materia es rápido; hoy en día, los vehículos premium cuentan con aún más innovaciones en lo que se refiere a iluminación, incorporando sistemas inteligentes que se adaptan a las condiciones de luz, meteorología y velocidad a la que se circula, entre otras novedades. En este sentido, la iluminación láser ha ido un paso más allá, alcanzando una visión de 600 metros de distancia con un 30 % menos de consumo en comparación con los faros LED.
Eficiencia y etiquetado energético
En términos de cuidado medioambiental y eficiencia energética, la tecnología LED es una buena alternativa, puesto que solo emplea un material semiconductor no contaminante, un poco de cobre y plástico, ofreciendo una luz blanca de calidad, de gran durabilidad y de bajo consumo. Así pues, el concepto de movilidad sostenible está ganando mucho peso en nuestros días, puesto que aspiramos a un modelo de transporte que responda a las actuales y futuras necesidades económicas, sociales y ambientales de la sociedad, sin perjudicar el medioambiente.
La hoja de ruta es que tengamos constancia del consumo de energía, estableciendo unos indicadores por medio de la etiqueta energética de automóviles y, finalmente, estudiar, desarrollar y ofrecer opciones de movilidad con combustibles y tecnologías alternativas. La movilidad sostenible abarca los diferentes tipos de transporte público y privado, así como la calidad de las infraestructuras, la contaminación acústica y del aire, la salud, la seguridad, el respeto por el entorno natural, etc. Se trata de un concepto amplio y complejo que engloba numerosos aspectos, el cual se ha convertido en un propósito firme en la mayoría de países, poblaciones y áreas metropolitanas.