El Ministerio de Interior ha desarrollado junto a Deloitte una Guía sobre Seguridad en Dispositivos IoT) con el objetivo de concienciar a la ciudadanía de la necesidad de implantar medidas de protección a dispositivos que usen esta tecnología.
El IoT ha experimentado un crecimiento exponencial, como lo demuestran los 10.000 millones de dispositivos conectados a nivel mundial en 2022, una cifra que se espera alcance los 25.000 millones para 2030. Esta expansión trae consigo una mayor complejidad en la gestión y seguridad de los dispositivos.
Es importante entender que el IoT no se limita a gadgets de uso cotidiano; su alcance abarca desde el sector salud hasta la industria automovilística, pasando por la manufactura y el comercio minorista. En cada uno de estos sectores, el IoT desempeña funciones vitales, optimizando procesos y generando nuevas oportunidades de negocio.
Es por ello que con la creciente cantidad de dispositivos conectados aumente proporcionalmente el riesgo de brechas de seguridad. Los dispositivos IoT, a menudo diseñados con un enfoque más funcional que seguro, pueden convertirse en puntos vulnerables dentro de las redes. Estas vulnerabilidades no solo comprometen la integridad de un solo dispositivo, sino que pueden extenderse, afectando la seguridad de toda la red y poniendo en peligro datos sensibles.
La Guía pretende afrontar todos estos problemas, repasando, en un primer momento la normativa actual, para posteriormente hacer un recorrido por el uso del IoT en los diferentes sectores esenciales y los riesgos a los que se enfrentan. Finalmente, se proponen una serie de recomendaciones y buenas prácticas para fortalecer la seguridad en estos ecosistemas IoT:
- Segmentación de Redes: Es vital dividir la red en segmentos más pequeños y controlados, lo que limita el potencial daño en caso de una intrusión.
- Inventario de Dispositivos: Mantener un registro actualizado de todos los dispositivos IoT en la red es clave para gestionar de manera efectiva su seguridad.
- Configuración Segura: La configuración predeterminada de fábrica, especialmente las contraseñas, debe cambiarse por opciones más seguras y personalizadas.
- Actualizaciones Constantes: Tanto el firmware como el software de los dispositivos deben mantenerse actualizados para protegerse contra vulnerabilidades conocidas.
- Restricción de Conexiones Externas: Limitar el acceso de los dispositivos IoT a servidores externos es una medida crucial para prevenir accesos no autorizados.
Con esta Guía el Ministerio de Interior da un paso importante hacia la sensibilización sobre la seguridad en el IoT. Sin embargo, es solo el comienzo. Los profesionales del sector y los ciudadano deben estar constantemente actualizados y preparados para implementar estas estrategias y otras que surjan en este dinámico campo. La seguridad en el IoT no es solo una cuestión de proteger dispositivos; es un imperativo para salvaguardar nuestra sociedad digital en constante evolución.
Puede acceder a la guía a través del siguiente enlace (descarga PDF):
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