A la mayoría de personas en todo el mundo le gustaría disfrutar de una vida más saludable y sostenible. Sin embargo, la barrera más grande percibida para lograr este objetivo radica en que es demasiado caro conseguirlo. Estos son algunas de las conclusiones sacada de la encuesta mundial realizada por GlobeScan en asociación con varios socios com IKEA, VISA, PepsiCO, etc., sobre la Vida Saludable y Sostenible.
El estudio encuestó a 25.000 personas en 25 países para explorar las preocupaciones, expectativas y las oportunidades actuales para apoyar estilos de vida más saludables y sostenibles.
En el mismo se muestra como existe una mayor preocupación en los ciudadanos de todo el mundo por los problemas ambientales, además muestra que existe una brecha entre la intención de las personas de vivir manera saludable y sostenible y su comportamiento actual. El 54% de las personas en todo el mundo ve una vida saludable y sostenible como una prioridad personal importante, mientras que solo el 2% no lo consideran relevante. Sin embargo, solo el 6% dice que ahora vive de esta manera de forma completa.
Los jóvenes (de entre 18 y 24 años) muestran una brecha más grande entre el estilo de vida previsto y el real que aquellos encuestados de mayor edad, a la vez que se sienten más culpables por su impacto ambiental negativo, lo que sugiere una necesidad (y oportunidad) de permitir una vida sostenible y saludable para este grupo demográfico.
El estudio encuentra que una de las principales barreras que impiden a las personas lograr ese estilo de vida es que lo perciben como demasiado costoso en términos económicos. Muchos además indican la necesidad de que las empresas y gobiernos ayuden en este objetivo, proporcionando productos y servicios que hagan fácil y asequible el poder vivir una vida saludable y sostenible.
El estudio confirma que las personas están cada vez más preocupadas por el medio ambiente, y cada vez más gente en en los 25 países ven como una variedad de problemas, incluida la contaminación ambiental y del aire, el cambio climático, la escasez de agua dulce y la pérdida de biodiversidad, como un poblema “muy grave”.