Un equipo de investigadores del Instituto Niels Bohr, dependiente de la Universidad de Copenhague en Dinamarca, ha desarrollado un método capaz de evitar el ruido en el detector del instrumento de medición gracias a la luz láser. Este nuevo método, basado en la interacción compleja entre un movimiento mecánico y la radiación óptica, permite lograr una precisión muy superior a la existente actualmente en las mediciones.
El ruido en el detector de un instrumento de medición limita el grado de sensibilidad y precisión de las mediciones que se pueden hacer. El principal responsable de este ruido es el calor, que hace que los átomos y los electrones se muevan de forma caótica, por lo que las mediciones se vuelven imprecisas. Hasta ahora, para reducir el ruido en el detector del aparato de medición, se lo enfriaba a una temperatura bajísima, de entre 263 y 268 grados centígrados bajo cero. Sin embargo, esto es caro y no permite además las mediciones de las señales más débiles.
El equipo de Eugene Polzik, profesor y jefe del Centro Quantop de Investigación en el Instituto Niels Bohr, ha desarrollado un detector que no necesita ser enfriado. Así, puede funcionar a temperatura ambiente y carece casi por completo de ruido térmico. El único ruido del que no se libra es el conocido como ruido cuántico, que consiste en las fluctuaciones ínfimas de la propia luz láser.