La inversión en el sector inmobiliario en Europa alcanzó los 85.500 millones de euros en el primer trimestre del año, manteniendo su solidez pese a encontrarse en una fase madura del ciclo, según datos de CBRE.
En el impulso de estas cifras ha influido la mayor estabilidad en Reino Unido tras las elecciones generales de diciembre pasado, país en el que los inversores se mostraron cautos en 2019 debido a la incertidumbre generada por el Brexit. En Reino Unido la inversión en el primer trimestre de este año ha sido un 33% superior al del año 2019.
Asimismo, algunas mega operaciones que venían gestándose meses atrás lograron cerrarse entre enero y marzo. Por ejemplo, en Alemania se completó la adquisición de la plataforma de Adler Real Estate por Ado Properties así como la de TLG Immobilien por Aroundtown, por un importe total de 10.000 millones de euros; por otro lado, en Reino Unido culminó la venta de la cartera de residencias de estudiantes de IQ por parte de Blackstone por 7.400 millones de libras.
Sin embargo, aun descontando estas operaciones corporativas, los volúmenes de inversión en el primer trimestre de 2020 todavía aumentaron un 15% en comparación con el mismo período del año pasado, lo que equivale al tercer mejor primer trimestre registrado.
Si bien estos volúmenes no reflejan el sentimiento actual del mercado, y no será hasta el segundo trimestre cuando se vea el impacto de Covid-19 en el mercado de inversión europeo, la alta actividad en el primer trimestre de 2020 indica la gran cantidad de capital disponible para invertir en el sector inmobiliario europeo e induce a pensar que la actividad recuperará fuerza una vez que se desvanezca la incertidumbre sobre Covid-19. Afortunadamente, el sector inmobiliario ha entrado en esta fase de inestabilidad con unos fundamentos sólidos y debería ser capaz de recuperar su buen tono en el medio-largo plazo.
Diversificación: En España todos los sectores registraron un alto interés por parte de los inversores
Las buenas perspectivas del sector oficinas hizo que, al igual que en 2019, fuera uno de los sectores favoritos en el arranque del año, con 856 millones de euros invertidos, el 26,5% del total. Entre las operaciones más importantes destaca la compra del edificio Helios por parte del fondo surcoreano Kiwoon por 190 millones de euros y la del P.E. Castellana Norte por parte del fondo norteamericano Harbert Management por 127 millones de euros, ambas operaciones asesoradas por CBRE.
El cierre de grandes operaciones que venían madurándose desde hacía meses en el sector retail, que el año pasado registró la menor cifra desde 2014, ha ayudado a impulsar la cifra global. En total se han invertido 797 millones de euros en este sector en el primer trimestre frente a los 252 millones en el mismo periodo de 2019. Entre las operaciones más destacadas figuran la venta del centro comercial Parque Principado adquirido por el fondo alemán ECE a Intu por 290 millones de euros, operación asesorada por CBRE. No obstante, es evidente que el obligado cierre de todo tipo de tiendas y espacios comerciales va a influir aún más negativamente en un sector que ya estaba debilitado por el auge de la venta online. En el otro lado de la balanza se constata el alto interés por parte de los inversores por activos de cadenas de alimentación, en operaciones de sale&leaseback con contratos a largo plazo.
En cuanto a volúmenes de inversión residencial se alcanzaron los 597 millones de euros, de los cuales sólo en residencial directo (PRS y BTR) fueron 455 millones de euros. La compra por parte del inversor norteamericano Hines de 400 viviendas destinadas al alquiler a Acciona por 110 millones de euros fue otra muestra del enorme interés que este sector tiene para los inversores extranjeros.
El sector logístico, con 390 millones de euros invertidos, un 80% más que en el primer trimestre de 2019, también arrancó con gran fuerza. En esta cifra se incluyen las 11 naves localizadas en España, parte de una plataforma paneuropea adquirida por el fondo alemán Patrizia a GreenOak-Eastdil. Por último, el sector hotelero, ahora en el ojo del huracán junto al sector retail, arrancó en el primer trimestre con 467 millones de euros invertidos, destacando la adquisición del hotel Edition en Madrid por 220 millones de euros por parte de Archer Hotel Capital, propiedad de APG -filial inversora de ABP, los fondos de pensiones holandeses- y GIC -fondo soberano de Singapur.
Todas estas operaciones, así como el perfil de los compradores, dejan patente el atractivo del mercado inmobiliario español. Precisamente, la intensidad de la demanda en los últimos trimestres redujo las rentabilidades en prácticamente todos los sectores a niveles históricamente bajos, llegando por ejemplo al 3.00% en oficinas y por debajo del 5% en producto logístico prime respectivamente, punto desde el que parten en esta nueva etapa que ha inaugurado el brote del Covid-19.
Según Lola Martínez-Brioso, directora de Research de CBRE España, “es prácticamente seguro que las previsiones de volúmenes de inversión realizadas a principios de año no se cumplirán, debido a que la elevada incertidumbre ralentizará la actividad en los próximos meses en el mercado de inversión. Los inversores han adoptado mayoritariamente una actitud de wait and see, a la espera de tener mayor visibilidad de la duración e impacto en la economía real de esta crisis sanitaria que ha pillado al mundo por sorpresa. Desde luego, en la certeza de que esta es una situación transitoria, más o menos larga, pero coyuntural, permanecen muy atentos a las oportunidades que puedan surgir.”