Esta semana se ha inaugurado el tercer piloto del proyecto CromaLux en Santiago de Compostela, con el objetivo de comprobar la efectividad de un innovador sistema de iluminación con capacidades biocidas que permita evitar la proliferación de microorganismos en las fachadas.
Antes de la inauguración, se presentaron los resultados conseguidos hasta ahora del proyecto de iluminación inteligente, en la que participaron el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, el regidor Sindo Guinarte, responsable del proyecto Smartiago; Sebastián Pantoja, Director de Programas Estratégicos de Televés; y Patricia Sanmartín, directora de investigación de la Universidad de Santiago de Compostela (USC); quien explicó que la colonización biológica en áreas iluminadas con CromaLux fue inhibida significativamente, reduciéndola a un tercio o menos de lo que había sido habitable.
“Definitivamente el proyecto está consiguiendo resultados muy positivos en la inhibición de la colonización biológica. Además, CromaLux causa un impacto significativamente nulo en la biodiversidad nocturna (tomando como grupo de estudio a las comunidades de insectos) resultando su efecto, tanto en la cantidad como en la diversidad de los insectos, casi igual a que el área no esté iluminada”, explicó Sanmartin.
El proyecto CromaLux pretende preservar el estatus de Santiago de Compostela como modelo de conservación del patrimonio a través de una iluminación ornamental inteligente. Para ello se ha desarrollado este sistema de iluminación eficiente y ambientalmente responsable para el control de la colonización biológica en elementos de alto valor patrimonial, aprovechando la tecnología LED y el control remoto de iluminación con capacidad bioestática, que se integra fácilmente en edificios de alto valor patrimonial. Asimismo, otro de los objetivos es la preservación de las condiciones naturales de las horas nocturnas en beneficio de la fauna, flora y ecosistemas en general. En el desarrollo del proyecto están trabajando la USC, y las empresas Televés y Ferrovial.
El primer ensayo del proyecto CromaLux se produjo en el patio de la antigua prisión de Pazo de Raxoi. Y luego se instaló un segundo piloto en la fachada de Cada do Casildo. Ahora se inaugura el tercero en la Plaza de Cervantes.
“Los resultados del primer piloto del Patio de la Prisión son más evidentes, por el mayor tiempo transcurrido, observándose que la capacidad bioestática de la iluminación se potencia con el tiempo, así como con la mayor presencia inicial de organismos. Según los resultados tomados quincenalmente, en los últimos meses se observa una tendencia positiva, que marca un crecimiento de la colonización al aplicar la iluminación convencional actual en los monumentos del centro histórico de Santiago, mientras en las zonas sin iluminar y con CromaLux la tendencia es negativa, con una disminución de casi el doble con la solución nueva respecto a las zonas sin iluminar”, detallaba Sanmartín el pasado mes de febrero.
El proyecto, está encuadrado dentro de la iniciativa Smartiago, que se desarrolla gracias a un convenio de colaboración de la Línea FID (Fomento de la Innovación a partir de la Demanda) entre el Ministerio de Ciencia e Innovación y el Ayuntamiento de Santiago de Compostela y está financiado en un 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) en marco del programa.
Imágenes: Ayuntamiento de Santiago de Compostela