La recientemente estrenada Unidad de Cuidados Intensivos de Vall d’Hebron, se trata de una UCI inteligente por estar equipada con la tecnología más avanzada de monitorización y diagnóstico, a la vez que todos los datos generados por el equipamiento se centralizan en el programa Smart Display. Se trata de un programa pionero en el Estado en una unidades de cuidados intensivos, que permite generar información que facilita la toma de decisiones y, además, mejorar el funcionamiento de la unidad. Además, por primera vez en Europa, las camas están también conectadas al sistema Smart Display.
La nueva smart UCI es la más grande de España, con una extensión de 3.500 m2 y 56 boxes (dieciséis más que antes), todos individuales. Esté estructurada en tres sectores, cada uno con su área de control. El presupuesto ha sido de 20 millones de euros, donde 10 millones fueron destinados para la construcción de la infraestructura y más de 10 millones en equipamiento.
Como explica el Dr. Ricard Ferrer, Jefe de Servicio de Medicina Intensiva de Vall d’Hebron, el hecho de ser una smart UCI implica que “todos los datos de todos los equipos se recogen para generar información que facilite la toma de decisiones y, además, mejore la organización de la UCI. Por lo tanto, la nueva UCI se beneficiará de la experiencia para aprender y mejorar”.
Los datos clínicos que genera el equipamiento médico (por ejemplo, presión arterial de los pacientes) o que provienen de la historia clínica (analíticas) se envía al programa Centricity Critical Care (CCC), que convierte los datos en información clínica para tomar decisiones. Paralelamente, se recogen datos relativos a seguridad (información de la cama, respiradores, etc.). Estas dos clases de datos se integran en el sistema Smart Display, programa innovador y único en el Estado en una UCI, para generar nueva información (por ejemplo, cuántas veces el paciente quiere respirar y el respirador no lo permite). Además, la información de todos los pacientes se traslada en tiempo real a un gran monitor situado en el Área de Control de los profesionales para facilitar la toma de decisiones.
“Las nuevas camas inteligentes están conectadas a la Smart Display, un hecho pionero en Europa, y envían información al sistema sobre el peso del paciente, posición para que no pase mucho tiempo inmóvil, movimientos o altura de la barandilla para evitar caídas”, añade el Dr. Ferrer.
Una iluminación que imita el ciclo natural día-noche
Por otro parte, la instalación de iluminación ha sido diseñada para que imite el ciclo de luz natural día-noche, hecho que favorece una mejor orientación de los pacientes y la regulación hormonal. El sistema Smart Display está conectado con el sistema Smart Building, que controla el edificio de la UCI. Gracias, por lo tanto, a la domótica, el edificio también colabora en la atención de los pacientes. Por ejemplo, cuando se activa un Código Azul (los equipamientos médicos detectan un paro cardiaco), el Smart Building enciende una luz azul ante el box, se activa la luz de trabajo y se abren las puertas del box. Además, también como novedad, el Área de Investigación está integrada físicamente en la nueva smart UCI. Investigación integra toda la información generada en los anteriores niveles. Y facilita el aprendizaje y la mejora de la nueva UCI. Por ejemplo, desde Investigación se puede establecer que, en caso de Código Azul, haría falta que el equipamiento necesario para atender al paciente se desplazará automáticamente al box.
Como remarca el Dr. Ferrer, “de este modo, la UCI se ha diseñado para aprender gracias a la experiencia y la tarea de los profesionales. Esto permitirá mejorar la gestión, tomar mejores decisiones, y ser más eficaces en la atención a los pacientes”.