En términos de iluminación subacuática y arquitectónica no se puede definir una regla estricta de iluminación. En iluminación de piscinas o fuentes dependerá del propietario de la instalación, de los criterios estéticos que precise, de los modelos de la luminaria utilizada… pero como norma general se precisa de una iluminación uniforme con un correcto dimensionado del número de luminarias en funciones de la instalación, teniendo en cuenta parámetros como profundidad, forma, color del vaso entre otros… De allí la importancia de realizar un estudio previo del proyecto para la correcta dimensión y poder apreciar de antemano el resultado lumínico.
En el mercado hay un sinfín de productos de iluminación subacuática, pero a la hora de elegir la instalación de un producto u otro se deben tener en cuenta los siguientes parámetros para evitar algunos problemas:
Robusteza: Es importante escoger productos de solvencia contrastada y calidad garantizada.
El agua es un elemento muy hostil y en largos periodos de inmersión es fácil que los productos sin una suficiente calidad presenten filtraciones de agua y desperfectos. Esto supone un quebradero de cabeza y unos gastos importantes en mano de obra y reemplazo de material, así que se recomienda el uso de productos de empresas solventes y con una fiabilidad contrastada.
Lentes: Es importante que los proyectores dispongan de lentes para una correcta iluminación del agua: fuente ornamental o piscina. Las lentes son las encargadas de direccionar la luz donde se precise. Cuando hay agua a iluminar por en medio la función de las lentes es aún más importante para conseguir una correcta iluminación ya que el agua actúa como una pantalla y no deja pasar correctamente la luz.
Color: Actualmente hay una gran cantidad de temperaturas de color en los proyectores subacuáticos: cálidas (3000K), neutro (4000K) y fría (5700K). Además, hay la opción de la temperatura de color multicolor o RGB y RGB+W (RGB+White), utilizando así la mejor opción para cada proyecto.
Si se elige los proyectores LED multicolor, RGB o RGB+W deben ir acompañados con algún sistema de control para “gobernar” el cambio de color y las diferentes secuencias programadas.
Sistemas de control
Con la llegada de la tecnología LED que permite incorporar la electrónica en las luminarias se amplían las posibilidades, funciones, colores y sistemas de control de los proyectores.
Hay sistemas de controles propios de cada fabricante y estándares de automatización de iluminación como el DMX o KNX. Con este tipo de controles, el usuario puede programar además del encendido y apagado diferentes efectos de luz, creando infinidad de combinaciones, hasta 16.000.000 de colores diferentes.
La iluminación subacuática se ha convertido en una experiencia para las personas. Con ella se pretende resaltar y destacar puntos de interés, de allí la importancia en elegir bien quien va a iluminar los espacios acuáticos y arquitectónicos y los productos propuestos.
Ignialight es una empresa especialista en diseñar soluciones lumínicas: subacuáticas y arquitectónicas. Nuestro proyecto luminotécnico refleja fielmente los resultados del proyecto, además de “diseñar” donde insertar los proyectores para que durante el día la luminaria quede prácticamente integrada o muy discreta en el conjunto subacuático y por la noche la iluminación cobre protagonismo.
Nuestros proyectos realizados nos avalan como una empresa preparada tecnológicamente, con un producto de calidad y versátil para cubir con las necesidades de los proyectos más exigentes del sector.
Si precisa más información:
Artículo elaborado por el Departamento de Marketing de Ignialight