Un arquitecto de Sídney adquiere junto con su equipo un edificio industrial histórico protegido. Los espacios renovados demuestran con carácter ejemplar cómo, sobre la base de un diseño de iluminación orientado a la percepción, es posible implementar una solución de iluminación expresiva tan agradable como eficiente para oficinas.
Para un arquitecto no existe apenas – exceptuando el edificio de estudio diseñado por él mismo – un espacio de oficinas más adecuado que una antigua planta de fábrica. La calidad atmosférica de estos espacios, a menudo de techos altos, su encanto rudo y su carácter de taller explican la atracción que ejercen sobre los creativos. Esta seducción ha atrapado también al arquitecto Angelo Candalepas, quien el año pasado se trasladó junto con su equipo a un edificio industrial histórico protegido ubicado en el centro de Sídney.
La luz como objetivo prioritario en el diseño de estas oficinas
Uno de los retos del diseño de iluminación en este proyecto residía en las diferencias de intensidad debidas a la incidencia de luz diurna en las distintas zonas, que requería alcanzar un cuidadoso equilibrio entre la luz natural y la artificial. De ahí que se utilizaran en toda la oficina luminarias regulables de 3000K, a fin de poder adaptar la luz artificial a los niveles de luz diurna. Otra tarea surgió en la fuertemente estructurada zona del techo. Se consiguió integrar los raíles electrificados ERCO de forma tan discreta que en todo caso se perciben como complemento.
Concepto de iluminación diferenciado con tres familias de luminarias
Partiendo de la filosofía de iluminación de Richard Kelly, según la cual solo debe utilizarse la luz allí donde se requiera, se desarrolló un concepto de iluminación diferenciado que se limita esencialmente a tres familias de luminarias. Mientras que en el sótano, donde la luz natural es escasa, los downlights Starpoint de 8W y distribución luminosa wide flood crean una atmósfera acogedora, en la zona de entrada y en los espacios de oficina se utilizan proyectores de las familias de luminarias Parscan y Pantrac con diversas potencias y distribuciones luminosas.
En la planta baja, que alberga sobre todo espacios de reunión, los bañadores de pared Parscan de 24W garantizan un entorno de iluminación que satisface varios propósitos: otorga mayor amplitud visual a los espacios de forma alargada, escenifica la arquitectura antigua y hace que los grandes tableros de anuncios sean legibles. De la iluminación de acento se encargan proyectores Parscan de 24W con lentes flood, orientados hacia las mesas de reunión.
En las áreas de la oficina que se utilizan para el trabajo ante la pantalla – situadas en la primera y la segunda plantas – se emplean proyectores Parscan con distribución luminosa oval flood para la iluminación uniforme y sin deslumbramiento de las superficies de los escritorios. Para la iluminación del entorno se recurrió una vez más a los bañadores de pared Parscan, en este caso de 12W, pero en zonas con techos especialmente altos se complementaron con bañadores de techo Pantrac con una potencia de 24W.
El toque final de la solución de iluminación
Por lo que respecta al concepto de iluminación, se reveló como especialmente delicado el despacho utilizado personalmente por Angelo Candalepas, debido al techo alto y a la abertura de ventana de gran superficie. Mientras que su escritorio se ubicó directamente junto a la ventana, la mesa de dibujo está muy alejada de la ventana. En este caso, dos bañadores de techo Pantrac de 24W proporcionan una iluminación ambiental adecuada, y un proyector Parscan dirige la luz exactamente hacia la mesa de dibujo. Para las horas vespertinas, sobre el escritorio de Candalepas se sitúa – casi como toque final – Lucy, la nueva luminaria para puestos de trabajo de ERCO, que despliega aquí sus ventajas funcionales: es girable, orientable individualmente y, sobre todo, puede regularse sin escalonamiento hasta un uno por ciento.