El patrimonio es la fuerza vital de las ciudades, es el corazón que les insufla vida, tanto a nivel histórico como identitario o turístico. El alumbrado urbano ocupa el lugar central de muchas reflexiones urbanísticas, ya que por la noche y con una iluminación inadecuada las sombras pueden engullir muchos edificios. Sin embargo, la iluminación arquitectónica de Schréder está ahí para ponerlos en relieve.
En los últimos años el surgimiento y desarrollo del concepto de «ciudades inteligentes» no ha hecho más que aumentar esta tendencia. Además de las consideraciones medioambientales y de seguridad asociadas al alumbrado urbano, muchas ciudades se interesan por la revalorización nocturna de su patrimonio histórico, optando por una iluminación LED sostenible, dinámica y, por tanto, duradera.
Las iglesias, monumentos, fachadas patrimoniales, castillos, jardines o esculturas son algunos de los lugares históricos que conforman la identidad de la ciudad y son motivo de orgullo de sus habitantes. Durante muchos años, la puesta en valor de estos lugares, si se hacía, solía limitarse a la instalación de una iluminación con las restricciones de su elevado consumo de energía y escasa flexibilidad. Hoy, gracias a los avances tecnológicos, estamos en disposición de ofrecer una iluminación arquitectónica sostenible y precisa, que resalta cada detalle de un monumento o edificio histórico.
Esculpir la luz con tecnología LED
Gracias a la tecnología LED, se puede ofrecer ahora una iluminación arquitectónica no sólo económica, sino también extremadamente precisa. ¿Cómo se consigue? esculpiendo la luz para realzar los más mínimos detalles arquitectónicos y así hacer resurgir la esencia, las características y la historia de un patrimonio histórico que recobra su esplendor. Así, participamos también a menudo en el resurgir patrimonial urbano, realzándolo con una iluminación arquitectónica precisa y específica. En muchos sentidos, el alumbrado urbano constituye una forma de arte con muchas ventajas: aumentar la sensación de seguridad, reforzar el sentimiento de pertenencia a la ciudad, realzar el patrimonio histórico y convertirlo en visita obligada para los turistas.
La tecnología LED también puede aportar un valor añadido importante gracias al sistema de control DMX. Este permite preprogramar una infinidad de juegos de luz con el fin de crear, por ejemplo, variaciones de color o de intensidad en función de las estaciones o de los eventos. En este sentido, podemos literalmente añadir valor a la vida nocturna de una ciudad «vistiendo» su patrimonio arquitectónico, sea cual sea este, para deleite de sus habitantes y de quienes la visitan.
Los proyectores ENYO y las luminarias de la gama SCULP y TERRA se integran perfectamente en cualquier entorno urbano ya que proporcionan diversas distribuciones fotométricas, permitiendo crear proyecciones arquitectónicas atractivas y personalizadas. Estos proyectores son ideales para acentuar detalles, reduciendo a la vez el consumo de energía. Asimismo, su resistencia y su alto grado de hermeticidad les confieren una gran durabilidad.
Un ejemplo claro fue el proyecto de iluminación del Tribunal Supremo donde el gran reto consistía en resaltar tanto la arquitectura como sus detalles con un efecto de “iluminación natural”, escogiendo una temperatura de color blanco neutro (3000K) y un índice de reproducción cromática del 80% que en combinación con una iluminación vertical uniforme que parte del suelo, pero limitando su altura, se logra simular la luz solar al dejar la cara inferior de las cornisas en sombra. Gracias a la instalación de 60 puntos de luz, se muestra en todo su esplendor nocturno, para el goce de residentes y turistas cada noche.
Iluminación arquitectónica en el corazón de la ciudad
Cuando una ciudad desea poner en valor su patrimonio a través de la luz, no se trata simplemente «de iluminar», sino sobre todo de replantearse el objeto patrimonial para integrarlo todavía más en el tejido urbano. De hecho, aparte de que la iluminación arquitectónica se ha convertido hoy en un tipo de iluminación que demanda poca energía gracias a la tecnología LED (generando así ahorro de energía para la ciudad), el alumbrado urbano constituye asimismo un medio excelente para embellecer la ciudad y dinamizar su tejido económico. Podemos observar muy a menudo el surgimiento de un auténtico efecto de atracción para turistas y residentes, pero también para los inversores, que suelen encontrar un entorno de vida agradable y un «escaparate» para sus comercios.
Las iluminaciones LED inteligentes que proponemos permiten que los espacios públicos sean más acogedores y cálidos. Aplicada al patrimonio, una iluminación arquitectónica bien diseñada le devuelve el puesto de «punto de referencia» que le corresponde. Por consiguiente, la iluminación de los proyectos patrimoniales permite, en paralelo con el alumbrado urbano, desarrollar una auténtica red de puntos de interés nocturnos creando ciudades seguras, brillantes y atractivas en las que la gente le gusta vivir.
Autor: Departamento de Comunicación de Schréder