El Palacio de la Asamblea, situado en la Plaza España de Melilla, se caracteriza por su fachada de estilo Art-Deco una obra del arquitecto Enrique Nieto iniciada en 1932. La iluminación de la fachada tenía una antigüedad de entre 20-25 años, el elevado consumo y la gran contaminación lumínica fueron factores clave que impulsaron a una actuación para conseguir una mayor eficiencia energética además de convertir a la ciudad en seña de identidad a través de la iluminación.
Un proyecto promovido por la Ciudad Autónoma de Melilla, Consejería de Fomento, Dirección General de Obras Publicas y cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y Javier Górriz, lighting designer quién confió en la gama SCULP de Schréder Socelec.
SCULPDOT y SCULPFLOOD dos soluciones basadas en el cambio dinámico de color RGB, controlado bajo protocolo DMX, ideal para recrear situaciones especiales y ensalzar los elementos ornamentales. Consiguiendo además, un ahorro del 92,67% respecto a la instalación anterior, y la reducción de los costes de mantenimiento.
SCULPDOT iluminación puerta de acceso y planta superior
SCULPFLOOD 60 iluminación de la planta inferior y parte superior de la puerta de acceso
La elección de la gama SCULP por Lighting Designer, ha sido uno de los factores más importantes a la hora de ensalzar los elementos pues cumplen con una serie de criterios de carácter económico, estético, de mantenimiento y energéticos.
Sobre el motivo que impulsó la renovación de la fachada del Palacio de la Asamblea, el lighting designer Francisco Javier Gorriz ha señalado que «el motivo que impulso esta actuación es la eficiencia energética, la iluminación que existía en la fachada tenía una antigüedad de entre 20-25 Años, esta tenía un elevado consumo, además de una gran contaminación lumínica al hemisferio superior, puesto que cuando fueron instalados los equipos existentes, no era posible dirigir con tanta exactitud como con las actuales tecnologías el flujo luminoso de las luminarias. Pero no hay que perder de vista que también se puede llevar a cabo una actuación de eficiencia energética y aportar al espacio, de una seña de identidad por medio de la iluminación, que haga sentir a sus usuarios orgullosos de su patrimonio y de la imagen que proyecta.»
Sobre la elección de la gama Sculp de Schréder Socelec para potenciar la estética visual de esta fachada de estilo Art decó, Gorriz destaca que «se barajaron gran cantidad de marcas y modelos pero el reducido tamaño de la luminaria, incluir en su interior driver y sistemas de control, fueron uno de los motivos principales, además sus líneas rectas y forma rectangular se integraban perfectamente en la Arquitectura.» Por otro lado el lighting designer también ha apuntado que «el criterio clave fue la Eficiencia, además se recuperaron espacios que en otra época estuvieron iluminados y que actualmente no lo estaban, también se han incorporado unas notas de acento en aquellos elementos arquitectónicos que lo requerían, y el sistema de control instalado, permite un ahorro de energía en aquellos tramos horarios en los que los niveles lumínicos son susceptibles de disminuir. La sustitución de todo el sistema, incluido tanto las Luminarias como el sistema de control, ha hecho posible que se alcance un ahorro de un 92,67% con respecto a la instalación anterior, además hay que sumar el ahorro de mantenimiento que conllevaba la anterior instalación basada en luminarias de Halogenuro Metálico y Vapor de Mercurio.»
Para este proyecto, se ha contado con un sistema RGB que permite programar diferentes colores, creando distintos ambientes para eventos concretos o estaciones del año, un aspecto que se adecúa al edificio según Gorriz ya que «el Palacio de la Asamblea de Melilla, es el espacio por excelencia representativo de la Ciudad, y por tanto una forma de expresión de la Ciudad para con la ciudadanía y los visitantes. La mayor parte del funcionamiento de la Iluminación Arquitectónica de la fachada, permanece en su escena de color Cálida cumpliendo la doble función de mayor eficacia de la luminaria y por su mayor integración con la arquitectura. Por medio del sistema de control y el sistema RGB hace posible esta comunicación por medio de la luz, y transforma completamente la percepción del espacio creando un espacio cambiante y dinámico para aquellos eventos que lo requieran.