Tres ciudades, tres proyectos piloto: Estocolmo, Colonia y una española, Barcelona lideran el proyecto Growsmarter para demostrar la viabilidad de las “Smart Grid”.
Las inversiones públicas para el desarrollo de las ciudades inteligentes están llegando a nuestro país. La última llega a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), del que nuestro Mº de Industria invertirá 153 millones € para impulsar el Plan Nacional de Ciudades Inteligentes, que busca la eficiencia de las entidades locales en la prestación de los servicios públicos a través de las TIC.
Pero ¿qué ocurrirá cuando se conecten todas las TIC instaladas? ¿Están preparados los sistemas de generación y distribución de España, para esto? Ya no se trata de desarrollar nuevas tecnologías, sino de ponerlas a funcionar y conectar. Esta es la razón de la iniciativa de la Comisión Europea, GrowSmarter. El proyecto se sirve de tres ciudades piloto (LightHouse Cities): Barcelona, Estocolmo y Colonia para mostrar la aplicación de las tecnologías y promover su implantación en otras ciudades. Las propuestas abarcan desde los barrios o distritos de bajo consumo energético, las infraestructuras integradas y la movilidad urbana sostenible, e incluyen métodos de adaptación para edificios de los años 60 y 70, además de la puesta en servicio de vehículos alimentados con fuentes de energía alternativas y la gestión inteligente del tráfico.
Fuentes de la Comisión Europea, calculan que este proyecto podría crear 1.500 empleos en toda Europa, reducir el consumo de energía en aproximadamente un 60% y recortar las emisiones del transporte también en un 60%.
Barcelona, es la ciudad española que acoge este proyecto dotado con 25 millones de euros de los cuales, de los cuales la ciudad condal contará con 7,5 millones para demostrar e integrar toda la tecnología y soluciones que ha puesto en marcha un consorcio integrado por Endesa, Abertis, IESE, Philips, Anteverti, Schneider, BSC, Cenit, IREC, Urbisup y Gas Natural.
El objetivo es la implementación de 12 soluciones Smart City: desde información avanzada, tecnología de la comunicación y una movilidad urbana mejor conectada, hasta el eficiencia energética. Las soluciones empleadas se pondrán en marcha en varias zonas urbanas, incluyendo distritos del centro y zonas periurbanas e industriales, para garantizar una muestra representativa de las ciudades europeas.
Cinco «ciudades seguidoras» («follower cities»), Cork, Graz, Malta, Oporto y Suceava trabajarán en estrecha colaboración con las «ciudades faro» para aprender de sus experiencias, y proporcionar un mercado para soluciones adaptadas al contexto local específico.
En concreto, Barcelona se centrará en cómo utilizar las nuevas tecnologías para convertirse en una Smart City y desarrollará diferentes proyectos en el campo de la energía y la movilidad. Las principales medidas a implementar para la ciudad son las que se detallan a continuación:
– Iluminación inteligente, farolas y hubs para comunicaciones
– Rehabilitación energética de edificios
– Producción local de electricidad e integración en edificios y en la red eléctrica
– Protocolo de Big Data para el ahorro energético y para la mejora de la calidad de vida
– Vehículos sostenibles para la descarbonización y la mejora de la calidad del aire
– Gestión inteligente del tráfico
Valorar los resultados de este proyecto pasa por medir el consumo de la ciudad antes y después de aplicar medidas.