A finales del mes de abril se presentó en Francia una iniciativa para incluir la modernización del alumbrado público dentro de los Planes de Recuperación que el Gobierno francés tiene previsto abordar con los fondos europeos.
La iniciativa tendría como objetivo el reconsiderar las infraestructuras de alumbrado público con una visión prospectiva, ambiental, digital, social, en todos los aspectos en línea con todos los objetivos de France Relance, el Plan de Recuperación de 100.000 millones de euros diseñado por el Gobierno francés.
La Fédération Nationale des Collectivités Concédantes et Régies (FNCCR), asociación de autoridades locales dedicada enteramente a la organización de los servicios públicos locales (energía, agua, digital, residuos), junto con Syndicat de l’éclairage, la organización que reúne a fabricantes de iluminación, y SERCE, entidad que representa las empresas de redes de energía, infraestructuras y servicios, han instado al Ministerio de Economía y Finanzas galo ha considerar el Alumbrado Público dentro de los planes de recuperación, solicitando una ayuda estatal de entre 10 a 12.000 millones de euros para la financiación del BEI en el marco del Plan Europeo de Recuperación.
Las tres organizaciones han elaborado un informe donde se recogen las líneas maestras que formarían parte de este Proyecto de Renovación del Alumbrado Público francés, argumentando por tipo de luminarias a reemplazar, cuantificadas en kWh, reducción de carbono y plazos de amortización. Las propuestas incluidas estarían acorde con la lógica del Plan de Recuperación, que se basa en tres componentes principales: ecología, competitividad y cohesión territorial.
Proyecto de Renovación del Alumbrado Público Francés
Actualmente, las instalaciones de alumbrado público en Francia están envejeciendo en muchos aspectos. De los 10 millones de puntos de luz, que representan un consumo de 5,7 TWh al año, el 40% tienen más de 25 años. La mayor parte del parque se compone de lámparas de descarga (sodio de alta presión, halogenuro metálico, vapor de mercurio). Casi todas las instalaciones no cumplen los objetivos actuales de reducción de la contaminación lumínica y preservación de los ecosistemas.
Por su parte, las instalaciones LED representan sólo entre el 12 y el 15% del alumbrado público francés. El ahorro de energía y de costes generado por la sustitución de las luminarias existentes por soluciones LED puede llegar a triplicarse. Además, la madurez de esta tecnología digital permite ahora alcanzar un factor de 4 a 5, lo que facilita un control mucho más preciso del alumbrado y, al mismo tiempo, satisface las exigencias medioambientales de los ayuntamientos y los ciudadanos.
Ante esta situación, la renovación del alumbrado, además de ser sencillo y rápido de aplicar, supondría un ahorro inmediato y significativo para las autoridades locales y los ciudadanos, al tiempo que satisface el resto de criterios marcados para aplicar a los fondos de recuperación europeo. Se conseguiría una importante reducción del consumo de energía y de la contaminación lumínica, implica el desarrollo de tecnologías innovadoras por parte de actores locales, fomenta la recuperación del tejido industrial y contribuye a la resiliencia de los territorios. Además, se trata de una puerta de entrada natural para el desarrollo de los territorios inteligentes, impulsando nuevos usos útiles para la salud, la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.
“Hacer que las redes de alumbrado sean inteligentes y aumentar los servicios a los ciudadanos a través de la telegestión, la regulación, la detección de presencia y muchos otros servicios es el nuevo paradigma del alumbrado público”.
12.000 millones de euros para sustituir 7.250.000 de luminarias
En el documento remitido al Gobierno se establecen las líneas de actuación estructurales de las que contaría el plan, y que están centradas en dar prioridad a la renovación de las instalaciones más obsoletas que no cumplen la normativa y son fácilmente identificables.
En particular, se apuesta por 5 líneas de acción encaminadas a la sustitución de:
- Luminarias equipadas con lámpara de vapor de mercurio
- Luminarias que emiten aproximadamente la mitad de su flujo luminoso por encima de la horizontal
- Luminarias sin difusores y reflectores internos
- Luminarias con una potencia igual o superior a los 250 W
- Centros de mando y cuadros de control
En conjunto, supondría la sustitución de 7.250.000 de luminarias y 260.000 centros de mando con una inversión total de 12.000 millones de euros, para conseguir ahorros de 3.000 millones de kWh.
A continuación detallamos cada una de las medidas, con los resultados a obtener:
Luminarias con lámpara de vapor de mercurio
“Omnipresentes en el parque de iluminación exterior en los años 60 y 70, estas luminarias están en su mayoría obsoletas. En aquel momento, ninguna de las luminarias cumplía los objetivos de control de la contaminación lumínica y eficiencia energética que se exigen hoy en día Estas lámparas y sus balastos ferromagnéticos (auxiliares eléctricos) consumen mucha energía, las potencias que se suelen utilizar son de 80W, 125W, 250W y 400W, a las que hay que añadir entre un 15 y un 20% de consumo debido al balasto”.
Los objetivos marcados son:
- Objetivo: 1.000.000 de luminarias a sustituir
- Presupuesto: 1.500 millones de euros
- Ahorro anual: 350 millones de kWh, o 22.470 toneladas de CO2 al año
- Plazo de amortización: entre 4 y 6 años
Luminarias que emiten aproximadamente la mitad de su flujo luminoso por encima de la horizontal
“Estos modelos de luminarias, que iluminan en todas las direcciones, son especialmente populares en zonas residenciales, áreas comerciales, explanadas, parques y jardines públicos. Actualmente, el Decreto del 27 de diciembre de 2018, exige su sustitución antes del 1 de enero del 2025. La FNCCR y los cofirmantes del documento recomiendan que se ayude a las autoridades locales a realizar estas modificaciones en sus instalaciones sin demora”.
Los objetivos marcados son:
- Objetivo: 3.000.0000 de luminarias a sustituir
- Presupuesto: 4.000 millones de euros
- Potencial de ahorro anual: 800 millones de kWh, o 51.360 toneladas de CO2 al año
- Plazo de amortización: entre 5 y 7 años
Luminarias sin difusores y reflectores internos
“Las luminarias que se comercializaban hace unas décadas no tenían todas cubiertas protectoras o reflectores para dirigir el flujo luminoso de la lámpara, dispositivos que empezaron a estar disponibles en los años 80. Estas luminarias con lámparas no transparentes (opalinas o pulverizadas) emiten en todas las direcciones, el flujo no puede ser dirigido con precisión sobre la zona a iluminar. La falta de un difusor y un reflector provoca fugas de luz perjudiciales para el cielo o las zonas circundantes y pérdidas de energía. La sustitución de este tipo de luminarias por luminarias LED permitirá erradicar estos puntos débiles de la red de alumbrado, evitar posibles averías, conseguir un importante ahorro energético, de mantenimiento y de conservación, multiplicando por cuatro o por cinco los costes de consumo y mantenimiento”.
Los objetivos marcados son:
- Objetivo : 750.000 luminarias a sustituir
- Presupuesto: 500 millones de euros
- Potencial de ahorro anual: 250 millones de kWh, o 16.050 toneladas de CO2 al año
- Plazo de amortización: entre 4 y 6 años
Luminarias con una potencia igual o superior a los 250 W
“En los años 70 y 80, cuando se introdujeron las lámparas de descarga de sodio de alta presión o de halogenuros metálico, el diseño de la iluminación era a menudo rudimentario. El objetivo principal de estas potentes lámparas era proporcionar más luz para garantizar la seguridad de las personas y los bienes. Por lo tanto, se puede conseguir un importante ahorro de energía en este tipo de luminarias, que suelen utilizarse en las entradas de las ciudades, las zonas industriales, las carreteras principales y las de transición”.
Estas luminarias constituyen actualmente la mayor parte del parque de alumbrado de las administraciones locales. También representan el mayor consumo y la mayor potencia instalada. Este es el «núcleo duro» de los 5,7 TWh de consumo anual del alumbrado público. Las potencias de estas lámparas son : 70W, 100W, 150W, 250W, 400W a los que hay que añadir de media un 15% más debido a los balastos ferromagnéticos.
Los objetivos marcados son:
- Objetivo: 2.500.000 luminarias a sustituir
- Presupuesto: 4.000 millones de euros
- Potencial de ahorro anual: 1600 millones de kWh, o 102.720 toneladas de CO2 al año
- Retorno de la inversión: entre 3 y 5 años
Centros de mando y cuadros de control
“La norma NF C 17-200 es el documento que regula las normas aplicables a la seguridad de las instalaciones eléctricas exteriores. Con la evolución del mobiliario urbano y, en particular, la aparición de los LED en las instalaciones de alumbrado exterior, estas normas han evolucionado. Como resultado, un gran número de cuadros de alumbrado público se consideran ahora obsoletos o no cumplen la norma. Se estima que el 40% de los armarios no cumplen la norma NF C 17-200. Representan un riesgo para la seguridad debido a su antigüedad (dañados, falta de estanqueidad, índice de protección IP no conforme, protección de circuito inadecuada)”.
La renovación de los cuadros no genera directamente un ahorro de energía, pero desde hace unos años es posible hacer la iluminación inteligente y adaptarla a las necesidades de los usuarios. Algunos armarios pueden estar equipados con controladores que permiten supervisar varias características del armario (índice de consumo, tiempos de conexión y desconexión, presencia de una avería en un circuito, etc.). Incluso es posible gestionar a distancia el encendido y apagado de los alimentadores de salida correspondientes en tiempo real, o garantizar la atenuación de la intensidad luminosa de determinados circuitos a petición. La gestión remota de la iluminación puede ir acompañada de la desconexión, o de la detección de presencia en determinados soportes, lo que permite una gestión más fina y eficaz de la iluminación de los territorios.
La renovación de los centros de mando representa el primer paso en la puesta en común de nuevos servicios (terminales WIFI, protección por vídeo, gestión de plazas de aparcamiento, etc.).
Los objetivos marcados serían:
- Objetivo: 260.000 centros de mando a sustituir
- Presupuesto: 2.000 millones de euros
- Retorno de la inversión: no es significativo
Fuente de imagen de luminarias y centros de mando: «PROJET DE RELANCE DE L’ECLAIRAGE PUBLIC»