Corría el año 1935 cuando terminaron las obras y fue inaugurado el Velódromo Vigorelli, levantado en el corazón de Milán en honor del ex ciclista Giuseppe Vigorelli. Tres días después tan sólo, en él se batía el record de la hora de ciclismo en pista y a partir de entonces dio cabida a grandes eventos, hazañas y desafíos deportivos, campeonatos internacionales como el Giro de Italia, o el campeonato del mundo de ciclismo en pista. Grandes campeones de la época como Fausto Coppi hicieron historia en el velódromo Vigorelli, que llegó a ser un templo mítico del ciclismo internacional.
El periodo de la Segunda Guerra Mundial fue nefasto para la pista, que quedó destruida como consecuencia de los bombardeos que sufrió la zona, pero para suerte de los muchos aficionados al ciclismo de la época y del deporte en general, una vez finalizada la guerra fue reconstruida. A partir de ahí recobró la notoriedad del pasado, siendo el lugar en que el ganador de la prueba más importante y famosa de Italia, el Giro de Italia, tenía el privilegio de dar la vuelta de honor. En esas ocasiones el campeón era acompañado por los ganadores del resto de categorías y también por el último clasificado, que vestía un maillot negro para ser identificado por los aficionados, lo que sin duda contribuía a aumentar la competitividad fruto de la cual Italia ha producido grandes campeones a lo largo de la historia.
En tan privilegiado entorno tuvieron lugar también grandes eventos musicales como el histórico concierto de los Beatles en 1965 y posteriormente el de Led Zeppelin, considerado el grupo más importante de la historia del rock. También sucedieron circunstancias menos felices como la gran nevada de 1985 que derrumbó la cubierta, lo que ocasionó su cierre durante varios años, después de sucesivos intentos infructuosos de devolverlo a la vida. Finalmente, en el año 2011 comenzó una nueva etapa para el Vigorelli con el auge del fútbol americano, dando cabida a varios equipos de Milán que desde entonces utilizan el recinto para sus entrenamientos y partidos oficiales de Primera División. En ese momento se planteó una reforma que hubiera significado la eliminación de la vetusta pista de madera, pero por fortuna y en el último momento las autoridades decidieron salvar y conservar este patrimonio sobre el que tantas gestas ciclistas habían tenido lugar, realizando una actuación de conservación.
GEWISS ha tenido el honor de estar presente durante el proyecto de renovación de este histórico lugar, desde la fase inicial hasta la fase de puesta en funcionamiento, en contacto con la oficina de ingeniería y arquitectura, elaborando los cálculos de iluminación y las tablas de apuntamientos, y también estuvo presente en la fase de implementación asesorando al instalador sobre la correcta disposición de los aparatos de iluminación.
En la actualidad el velódromo da cabida tanto a la pista de ciclismo como al campo de fútbol americano, gestionando las fuentes de luz a través de un sistema DALI que garantiza el correcto nivel luminoso para cada tipo de actividad que tiene lugar: entrenamiento, competiciones locales, carreras, etc….
La tribuna ha sido iluminada con 122 luminarias lineales estancas LED del tipo Smart [3] PLUS que cuentan con una estanqueidad aumentada IP66/IP69 y resistencia a impactos IK08, proporcionando un nivel medio de 100 luxes sin interferir en la visión de los espectadores, para su confort y mejor disfrute del evento deportivo.
El campo de fútbol americano está iluminado con 42 proyectores LED de alta potencia de la nueva gama Stadium PRO 3, diseñados para cumplir con los requerimientos de las competiciones profesionales más exigentes. Estos proyectores están equipados con un novedoso sistema óptico T.I.R.Ex, de forma que la parte inferior de la lente está diseñada para crear un haz de luz concentrado y la parte superior determina la apertura del haz. Estas lentes, que han sido objeto de un estudio en profundidad, han sido diseñadas y fabricadas por GEWISS y construidas en PMMA; un material que soporta altas temperaturas y tiene una alta estabilidad y resistencia a los rayos UV. La combinación de material y forma permite además un control térmico óptimo de la lente.
Con esta tecnología y la combinación de distintas ópticas se consigue en el campo de juego una iluminación media de 500 luxes, con una excelente distribución de la luz, tanto horizontal como verticalmente, para que tanto los jugadores como árbitros, espectadores y cámaras de TV, disfruten de una visión perfecta y con el máximo confort.
Por último, para iluminar la pista de madera se han dispuesto en su perímetro 142 proyectores LED de alta eficiencia del tipo Smart PRO 2M, que han sido colocados en el perímetro y aportan una gran versatilidad gracias a los numerosos tipos de ópticas disponibles, con los que consiguen superar el reto de iluminar correctamente los 397 metros de la pista con un nivel luminoso de 500 luxes de media, para iluminar las competiciones ciclistas con un confort pleno para los deportistas.
Autor: Departamento de Marketing de GEWISS