La última tecnología en iluminación se pone al servicio del arte en el Museo Picasso Málaga. La pinacoteca firmó ayer un acuerdo de patrocinio y colaboración con la Fundación Sevillana Endesa para sustituir los proyectores de halógenos por luces LED y permitir, no sólo un mejor rendimiento y optimización de la iluminación para resaltar la obra, sino también un ahorro de casi el 80% en el consumo energético.
La Fundación Endesa ha dedicado desde sus inicios, en el año 1989, una parte muy significativa de sus recursos a iluminar artísticamente destacadas obras maestras del patrimonio artístico español, donde hemos desarrollado más de 500 proyectos de iluminación entre los que podemos destacar joyas de la categoría como: La Catedral de Burgos, de Palma de Mallorca, la iglesia de San Martin de Tours, Fromista -Palencia ; el Puente de las Donadas, Montoro (Córdoba) así como Museo de la talla del Reina Sofía o el Sorolla.
Ahora el es turno para el Museo Picasso de Málaga, donde el presidente de la fundación, Antonio Pascual destacó que «la nueva iluminación va a ser más eficiente, va a suponer menor consumo de energía y a su vez mayor duración de los proyectores, ahorraremos en el consumo un 78% con respecto a una iluminación tradicional, además las lámparas van a tardar más en sustituirse, por tanto hablamos también de ahorro y apoyamos la sostenibilidad ambiental». En los cálculos de la firma, apuntó Pascual, «si tenemos iluminadas todas las salas durante nueve horas diarias a lo largo del año vamos a ahorrar la emisión de 13 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera». En total serán 42.376 kilovatios hora menos que los que se consumen hoy.
Mediante este convenio de colaboración, la Fundación Sevillana Endesa invertirá más de 133.000 euros para mejorar la luminosidad de las salas.
En total se instalarán 230 proyectores de tecnología LED y 60 lámparas reflectoras. Esta reconversión lumínica permitirá una considerable mejora en el rendimiento de la dotación lumínica sin producción de calor, garantizando la preservación de las obras de arte y favoreciendo su apreciación en unas condiciones más próximas a la luz natural. La nueva iluminación conllevará además una disminución del consumo energético y por consiguiente la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. «Este proyecto refuerza la responsabilidad del Museo Picasso Málaga con el medio ambiente iniciado en 2015 con la inscripción de la huella de carbono en el registro del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente», explicaron desde la pinacoteca.
Antonio Pascual desgranó las virtudes de la nueva iluminación. «Tendrá mayor luminosidad e intensidad y contarán con la posibilidad de ampliar los haces de luz de cada proyector», dijo Pascual. Además, cada proyector podrá tener mayor intensidad en función del elemento que se quiera iluminar, «se conseguirá que no se refracte la luz sobre el cuadro iluminado y que toda la concentración de luz vaya sobre el elemento que queremos iluminar, por lo que no se pierde luminosidad y que alcancemos una gama cromática de casi el 97%, como casi una iluminación natural», agregó el presidente de la fundación.
Los especialistas trabajarán de la mano de los técnicos del Museo Picasso para tener lista la nueva iluminación el 13 de marzo.