El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que acaba de recibir la aprobación inicial en el Pleno de Ceuta que estará en exposición pública una vez que sea publicado en los Boletines Oficiales, veta “disponer luminarias que proyecten la luz hacia el cielo” tanto “por su escaso rendimiento lumínico” como “por su contribución a la contaminación lumínica de los cielos”.
La iluminación cobra un papel relevante en este documento que también establece que “todos los espacios públicos, parques y zonas verdes” contarán con iluminación artificial específica “en función de los usos e intensidades previstas por los Proyectos de Urbanización” y que “las nuevas instalaciones de alumbrado público incluirán obligatoriamente equipos para la reducción del consumo energético mediante sistemas de reducción y estabilización del flujo luminoso”. Según consta en la relación de Normas Urbanísticas contenida en el tercer tomo del Plan “Con carácter preferente se emplearán lámparas que propicien el ahorro energético”.
Previniendo la contaminación lumínica en la edificación
La contaminación lumínica es un área que se trata también a en las condiciones de diseño arquitectónico de cada edificio y local. Concretamente menciona que “la instalación de alumbrado eléctrico se diseñará incorporando lámparas y luminarias de máxima eficiencia lumínica, minimizando en lo posible la potencia eléctrica instalada para este destino”. Y añade “se recomienda que toda edificación de nueva planta pueda incorporar, en lo posible, instalaciones productoras de otras fuentes de energía de las denominadas alternativas, con capacidad suficiente o razonable para las necesidades propias del edificio”.
Iluminación natural preferentemente durante el día
El PGOU establece que en el diseño de todo edificio o construcción “la iluminación diurna será preferente y básicamente natural (solar) en las dependencias destinadas a la estancia o al trabajo prolongado de personas. De esta forma la iluminación artificial solo debería ser “considerada como solución excepcional o de emergencia para las horas diurnas, sin perjuicio de determinadas actividades que requieran especiales condiciones de aislamiento lumínico o acústico”.
95% de las 12.500 luminarias de Ceuta no son eficientes
Según datos estimados por la Administración de Ceuta, su alumbrado público cuenta actualmente 12.500 luminarias de las cuales el 95% es “de baja eficiencia energética”. Esto supone “un elevado coste económico y medioambiental” del servicio de alumbrado público.
Consciente de ello, el Gobierno de Ceuta en el marco del nuevo Programa Operativo con Fondos Europeos ha incluido la sustitución de luminaria convencional de bajo rendimiento energético “por luminaria tipo LED que dará lugar a una reducción media de potencia instalada por unidad de un 70%”
Tres tipos de luminarias
Tres tipos de luminaria LED son los que se han definido, con el fin de unificar y reducir los tipos/modelos para obtener homogeneidad en el alumbrado y simplificar su mantenimiento y gestión.
Así, la planificación contempla la sustitución de los actuales conjuntos compuestos por luminaria de 400W, 250W y 100W por conjuntos de luminaria de 179W, 77W y 50 W respectivamente, logrando una reducción media de la potencia instalada del 70% sobre el 38% del conjunto total de alumbrado público.
El proyecto recibirá financiación del unos 3 millones de euros proveniente de instituciones comunitarias.