Aena, el mayor operador de aeropuertos del mundo por número de pasajeros, ha seleccionado a CANARD Drones para realizar la inspección y calibración de los sistemas PAPI de ayuda a la navegación aérea en siete aeropuertos. Esta es la primera vez que la tecnología RPA (Remote Piloted Aircraft, o drone) se utilizará para la inspección de estos sistemas.
El PAPI (o indicador de trayecto de aproximación de precisión) es una ayuda de navegación visual (NavAid) situada cerca del encabezado de pista que proporciona información de guía para ayudar a los pilotos a adquirir y mantener el ángulo de aproximación correcto en el aterrizaje. Dado que la mayoría de los accidentes aéreos ocurren en las fases de aproximación y aterrizaje, los aeropuertos de todo el mundo usan NavAids para facilitar a los pilotos aterrizar de manera segura.
Las inspecciones periódicas son vitales, ya que los NavAids pueden perder precisión como resultado de un funcionamiento continuo y condiciones climáticas adversas. Para cumplir con las regulaciones internacionales, los NavAids son inspeccionados periódicamente desde el aire. Las inspecciones son realizadas por aviones tripulados equipados con una consola de verificación en vuelo. Este proceso tiene un alto coste de combustible, mantenimiento de la aeronave y salarios de la tripulación especializada. Los vuelos de inspección tripulados son susceptibles a errores humanos y también afectan la disponibilidad de pistas. Esto significa que los aeropuertos pierden valiosos slots de despegue y aterrizaje, además de generar ruido extra innecesario. La configuración específica de estas aeronaves implica que hay un número limitado, reduciendo la disponibilidad a los aeropuertos.
Como alternativa, los drones de CANARD reducen costes y ofrecen un vuelo controlado, autónomo y repetible con mediciones de precisión centimétrica. Esto se debe a que el drone puede mantener un vuelo estacionario frente al PAPI, lo que permite realizar comprobaciones más precisas. La mayor disponibilidad de las aeronaves remotamente pilotadas favorece que los aeropuertos puedan realizar inspecciones bajo demanda, aumentando el número que pueden realizar, lo que significa que el mantenimiento de NavAids está optimizado.
«El uso de RPAs para la inspección de vuelo es revolucionario para la industria del transporte aéreo. Tras una proceso de evaluación, AENA eligió a CANARD basado en las fortalezas de nuestra tecnología. Nuestros drones ofrecen a los aeropuertos la oportunidad de hacer más y mejores inspecciones del PAPI, así como reducir o eliminar la necesidad de vuelos tripulados», dijo Jorge Gómez, Director General de CANARD Drones. «Nuestro sistema es la culminación de un largo proceso de investigación y desarrollo, y CANARD es ahora el líder mundial en innovación en el mercado de inspección en vuelo mediante drones. Estamos trabajando estrechamente con autoridades de la aviación civil y gerentes de aeropuertos internacionales para llevar nuestra tecnología a los aeropuertos de todo el mundo. «