El pasado martes 12 mayo, la Comisión Internacional de Iluminación (CIE), ante el cada vez mayor interés internacional por el el uso de la radiación ultravioleta (RUV) para controlar el riesgo de transmisión de la COVID-19, ha hecho pública una declaración de posición para clarificar su utilización, siguiendo los marcado por las dos publicaciones claves sobre la desinfección por radiación UV (CIE 187:2010 UV-C Photocarcinogenesis Risks from Germicidal Lamps y CIE 155:2003 Ultraviolet Air Disinfection). 

Esta nueva Declaración de Posición de la CIE resume estas dos publicaciones, que recientemente han sido puestas a disposición al público de forma gratuita, para explicar los aspectos más importantes en torno al uso de la RUV, en particular la UV-C (radiación ultravioleta que abarca el rango de los 100 a 280 nm) para gestionar y controlar la transmisión de esta enfermedad infecciosa. 

Los puntos claves del posicionamiento son los siguientes:

• la radiación UV-C es extremadamente útil para la desinfección del aire y de las superficies, así como la esterilización del agua. Sin embargo, la CIE y la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierten del uso de lámparas de desinfección UV para desifectar las manos o cualquier otra área de la piel (OMS, 2020). 
• la UV-C puede ser muy peligrosa para los seres humanos y animales, y sólo debe utilizarse en circunstancias cuidadosamente controladas, utilizando productos bien diseñados, asegurando que no se superen los límites de exposición especificados en ICNIRP (2004) y IEC/CIE (2006). Sin embargo, el riesgo de cáncer de piel de los dispositivos que sólo emiten luz UV-C se considera insignificante. 
• la UV-C puede causar fotodegradación de los materiales, y esto debe considerarse cuando los materiales susceptibles, como los plásticos, se encuentren en el entorno expuesto. 
• Es urgente que se realice una mayor investigación sobre los aspectos de seguridad de las nuevas fuentes UV-C, especialmente en lo que respecta a los umbrales de seguridad para evitar la fotoqueratitis (enfermedad ocular que ocurre cuando se tiene una alta exposición a los rayos ultravioletas). 
• Para una evaluación adecuada de la radiación UV y la gestión de riesgos, es esencial que las mediciones de la RUV sean apropiadas. 
• Los productos UV-C destinados a los consumidores en general pueden no ser seguros de usar o no ser eficaces para la desinfección.

La Declaración de Posición de la CIE puede descargarse de su página web y en breve se anunciará un seminario web explicativo sobre la misma.