Como los datos crecen exponencialmente, también aumenta su huella ambiental y aparece una brecha ecológica. Por estos motivos, 3M, a través de su Departamento de Electrónica y Energía, ha presentado un video titulado “Data Driven. Advancing A Sustainable Future – Gestión de datos. Avanzando Hacia Un Futuro Sostenible”, en el que muestra cómo se puede cerrar dicha grieta y ayudar así a crear un centro de datos más sostenible. De acuerdo a los expertos de la compañía, la industria tiene el potencial de reducir el consumo de energía hasta el 95 por ciento en centros de datos con la tecnología de refrigeración por inmersión.
Los datos son críticos y, por ende, se usan a la hora de solventar los problemas más difíciles. Sin embargo, la cantidad de datos se duplica cada dos años y su gestión se convierte en un desafío. 3M se ha unido recientemente a otros líderes de la industria en el Open Compute Project (OCP), que tiene la misión de cerrar la brecha de eficiencia energética en el centro de datos.
“Es maravilloso poder colaborar con múltiples organizaciones”, destaca Rocky Bullock, CEO de Open Compute Project. “La industria dispone de una amplia variedad de herramientas y experiencia y es fantástico observar cómo estas capacidades se unen para acelerar los avances”.
“Las medidas progresivas tratarán de adecuarse al enorme crecimiento de datos. El sector necesita innovaciones transformadoras que respalden las aplicaciones de Big Data. Hemos demostrado que la refrigeración por inmersión puede tanto permitir la gestión de datos en el futuro como garantizar su sostenibilidad ambiental”, comenta Michael E. Garceau, data center business manager de 3M. “Nuestra sociedad confía en los datos y la tecnología, pero también tiene que ser eficiente. Por ello, estamos muy satisfechos de habernos incorporado al Open Compute Project y ayudar a reducir la huella energética de los centros de datos”.
Alrededor del 38 por ciento de la electricidad consumida por un centro de datos se destina al enfriamiento de la electrónica. La refrigeración por inmersión utiliza una pequeña cantidad de la energía de un sistema de aire acondicionado. Los métodos más eficientes pueden lograr un PUE de menos de 1.02, en comparación con un PUE desde 1.1 a 2.0 con refrigeración tradicional en el centro de datos, eliminando chillers y unidades de aire acondicionado.
La refrigeración por inmersión posibilita una configuración ajustada de los componentes en menos espacio que los sistemas de aire acondicionado típicos. Permite dotar de más de 100 kilovatios de potencia informática por metro cuadrado y ocupa diez veces menos espacio. Con este tipo de refrigeración, es posible incrementar la capacidad de procesamiento y disminuir la latencia con menos deterioro de la electrónica.
“En lugar de separar la electrónica para poder refrigerarla, la alternativa de 3M permite juntarla con la refrigeración por inmersión”, añade Laura Nereng, electronics & energy business group sustainability leader de 3M. “Por consiguiente, proporciona una solución práctica que se puede usar en cualquier lugar”.