La ta edición del Congreso ESES, organizado por la revista El Instalador-Interempresas y las asociaciones A3e, AMI y Anese, cerró ayer sus puertas con la asistencia de 250 congresistas de alto perfil técnico y capacidad de decisión, que han podido ponerse al día y profundizar sobre los temas más candentes que afectan al sector: las nuevas reglas de Eurostat y la adecuación de las licitaciones públicas; las nuevas oportunidades de negocio que se abren en la Transición Energética; el papel de la digitalización en eficiencia energética, la clasificación de proveedores de Servicios Energéticos o el alumbrado como modelo de negocio ESEs. La inauguración contó con la presencia de Pilar del Olmo, consejera de Economía y Hacienda de Castilla y León.
Cerca de 250 congresistas compartieron conocimientos y experiencias sobre el mercado de los servicios energéticos. Como ya es habitual en este foro, también se presentaron nuevas tecnologías y casos de éxito de proyectos de servicios energéticos, y el que ya se ha convertido en un clásico en el Congreso: “Construyendo un caso”, que en esta edición se ha centrado en dar soluciones a una residencia geriátrica.
Tras día y medio en los que se ha compartido conocimientos y experiencias ha quedado patente que las empresas de servicios energéticos constituyen un eje estratégico para conseguir los objetivos climáticos, de ahorro y eficiencia energética, así como para luchar contra la pobreza energética.
Los contratos de rendimiento energético son modelos rentables económicamente y los servicios energéticos dan retornos competitivos y de éxito, generando, así mismo, un impacto medioambiental positivo. Sin embargo, tanto las empresas como las administraciones, todavía deben superar la falta de conocimiento y confianza en el modelo de servicios energéticos. Y para ello en el Congreso se han apuntado algunas recomendaciones, como que las ESES sean capaces de demostrar que el modelo funciona, con una rentabilidad comprobada y mejorar el acceso al cliente poniendo en valor el “Servicio Energético” no sólo como una suma de instalaciones y financiación.
Las soluciones que aporta la industria permiten cubrir un potencial de ahorro de más del 40% y son fundamentales para llegar a edificios de balance cero a medio e incluso corto plazo. Así mismo es notoria la importancia de los servicios energéticos en el alumbrado público, donde hay que mejorar aspectos de calidad, pliegos de contratos, mantenimiento y eficiencia lumínica.
Uno de los puntos que centró más interés fue el de la nueva Ley de Contratos del sector público y la guía interpretativa de Eurostat. Gracias a ello ha quedado patente que se han eliminado las principales barreras para la licitación de EPCs con inversión. Y en este punto, también se ha comentado que el Contrato Mixto de suministros y servicios sigue siendo una herramienta válida para la licitación tras el reciente informe de la Junta Consultiva de Contratación Pública.
La Normalización del sector era una reclamación de las asociaciones y la nueva Norma UNE de Clasificación de Proveedores de Servicios Energéticos supone la creación de un estándar que aporta claridad y transparencia al mercado mejorando la confianza en la contratación de servicios energéticos.
Finalmente, desde el sector se solicita a la Administración que la futura Ley de Cambio Climático y Transición Energética se desarrolle con consenso político y que contemple y favorezca aspectos como el autoconsumo energético. De hecho, esperan que el nuevo Gobierno retome el Grupo de Trabajo creado con las asociaciones sectoriales y apueste por los contratos de rendimiento energético.