Sube del 29% al 53% el porcentaje de los CEOs globales que prevén una desaceleración de la economía mundial en 2020. Sólo el 27% se muestra muy confiado en la evolución de los ingresos de sus empresas. Los CEOs españoles se suman al pesimismo generalizado, aunque el 71% cree que la desaceleración de la actividad mundial será moderada y descarta una recesión.
El exceso de regulación, las tensiones comerciales y la incertidumbre en el crecimiento económico, principales amenazas para los CEOs mundiales.
Preocupan también los cambios regulatorios en el ámbito tecnológico y de Internet y aumenta la sensibilización entre los máximos ejecutivos sobre el cambio climático.
Justo cuando nos encontramos en el comienzo de una nueva década, los CEOs mundiales muestran niveles récord de pesimismo sobre la evolución de la coyuntura internacional en 2020. El 53% de los primeros ejecutivos globales prevé una desaceleración del crecimiento económico mundial en los próximos doce meses, casi 25 puntos más que el año pasado y 48 más que hace dos. Se trata del nivel de pesimismo más alto desde 2012, año en que se empezó a formular esta pregunta. Dicho de otra forma, el porcentaje de CEOs que espera una mejora del PIB mundial ha pasado del 42% al 22% en los últimos doce meses. Esta es una de las principales conclusiones de la XXIII Encuesta Mundial de CEOs, elaborada por PwC, entre los meses de septiembre y octubre de 2019, a partir de entrevistas con 1.581 máximos directivos de todo el mundo, y que ha sido presentada hoy en el Foro Económico Mundial de Davos.
Este pesimismo es generalizado en todas las regiones del mundo y, particularmente, entre los CEOs de las empresas de Norteamérica, Oriente Medio y Europa Occidental. Los primeros ejecutivos españoles tampoco son ajenos a este sentimiento colectivo: el 78% espera que la economía mundial vaya a peor en 2020, un 12% cree que permanecerá igual y solo un 10% opina que mejorará. Sin embargo, un 71% cree que esta desaceleración de la actividad será moderada y no prevé una recesión económica global.
Los presidentes y consejeros delegados de todo el mundo tampoco son muy positivos sobre de la marcha de los ingresos de sus propias empresas en 2020. Sólo el 27% se muestra muy confiado en su evolución, el nivel más bajo desde 2009. De nuevo, la desconfianza es generalizada, aunque si miramos país por país se encuentran algunas diferencias. Los CEOs más optimistas sobre el comportamiento de sus compañías son los de China e India -el 45% y 40%, respectivamente, está muy confiado-, mientras que los de Estados Unidos (36%), Canadá (27%), Reino Unido (26%), Alemania (20%), Francia (18%) y Japón (11%) son los que tienen perspectivas menos halagüeñas. En el caso de los CEOs españoles, esta opinión es algo más positiva que la media: el 32% afirma estar muy confiado en cumplir con sus objetivos de crecimiento y un 41% dice estar algo confiado. Además, el 46% espera aumentar moderadamente sus plantillas, el 29% cree que seguirán igual y un 22% que se reducirán.
La Encuesta Mundial del CEOs de PwC se ha revelado, a lo largo de sus 23 años de existencia, como un excelente indicador adelantado sobre la evolución del crecimiento económico mundial. Si analizamos la correlación entre la confianza de los CEOs en la marcha de sus ingresos desde 2008 y el aumento real del PIB, estimamos que, en 2020, el crecimiento mundial podría caer hasta el 2,4%, por debajo de la mayoría de las previsiones y del 3,4% que calcula el Fondo Monetario Internacional.
Pero ¿qué está empujando a la baja las expectativas de los máximos ejecutivos de todo el mundo? La respuesta se resume en una palabra: incertidumbre. El año pasado, el incierto crecimiento económico no se encontraba entre las diez principales amenazas sociales, políticas y económicas para el crecimiento de las empresas, según los CEOs. Este año, sin embargo, ha escalado hasta la tercera posición, justo detrás de los conflictos comerciales -que pasan del cuarto al segundo lugar- y del exceso de regulación, que sigue perenne al frente de los desvelos de los máximos ejecutivos. Para los CEOs españoles, las cinco principales amenazas son, por este orden, el exceso de regulación -especialmente en materia laboral-, los ciberataques, la velocidad del cambio tecnológico y la incertidumbre política y geopolítica.
Regulación de Internet
La edición de este año de nuestra Encuesta Mundial de CEOs recoge la especial preocupación de los máximos ejecutivos de todo el mundo por los cambios regulatorios en el ámbito tecnológico. El 71% prevé que se aprueben nuevas normativas para regular el comercio electrónico, la privacidad y los contenidos en Internet y en redes sociales; el 68% para acabar con el dominio de las grandes compañías tecnológicas y el 51% para forzar a las empresas a compensar a los ciudadanos por el uso de sus datos. Sin embargo, existe división de opiniones sobre cómo se va a encauzar y cuáles serán los efectos de esa regulación: mientras que el 50% de los CEOs de todo el mundo cree que cada país o región va a aprobar sus propias iniciativas legislativas -lo que va a provocar la fragmentación de Internet-, un 40% espera que los países acuerden una única legislación global y no se produzca tal división. Los CEOs más preocupados por esta cuestión son los de las compañías norteamericanas, de Europa Occidental y de Oriente Medio.
La importancia del upskilling y del cambio climático
En el informe del año pasado, los presidentes y consejeros delegados coincidían en la necesidad de formar a sus empleados y ayudarles a adquirir nuevas capacidades digitales para que las empresas sean capaces de afrontar y sacar partido de todos los retos derivados del desarrollo de las nuevas tecnologías y de la robotización. PwC estima, después de analizar más de 200.000 puestos de trabajo en 29 países, que, a mediados de la década de 2030, el 30% de los empleos estarán potencialmente en riesgo de desaparecer como consecuencia de la automatización. Sin embargo, solo el 18% del total de los CEOs entrevistados ahora -el 20% de los españoles-, dicen haber realizado progresos significativos a la hora de poner en marcha programas de upskilling. Entre los principales obstáculos que se encuentran las empresas para llevar a cabo este tipo de iniciativas están la falta de motivación de los empleados o la escasez de recursos.
Finalmente, la XXIII Encuesta Mundial de CEOs hace un análisis específico de cómo ha evolucionado su opinión sobre el cambio climático en los últimos diez años y revela la creciente preocupación de los primeros ejecutivos. Entre 2010 y 2020, ha pasado del 16% al 30% el porcentaje de los CEOs que considera que combatir el cambio climático puede suponer una ventaja competitiva para sus empresas entre sus grupos de interés. En el caso de los consejeros delegados españoles este porcentaje es, ahora, del 37%. Se dan situaciones paradójicas como la de China -en la actualidad, el país con mayor polución del mundo, pero, a la vez, el mayor mercado de productos verdes del planeta-, donde el 47% de los CEOs se declara consciente de las oportunidades que el cambio climático ofrece a sus empresas. En 2010, esta opinión la sostenía sólo el 2%. Por el contrario, los CEOs de India y de Estados Unidos se muestran mucho más escépticos al respecto.