• La bajada del consumo de acero, el incremento de las importaciones y el descenso de las exportaciones a terceros países, debido a medidas proteccionistas, marcaron la actividad de la siderurgia española en 2016.
• Sin embargo, el sector mantuvo el pulso exportador y la situación mejoró en el último trimestre con un cambio de tendencia internacional en la mayoría de las empresas que cerraron año con mejores perspectivas de cara a 2017.
• El sector recicló más de 10 millones de toneladas de chatarra, afianzándose como la verdadera industria del reciclado y uno de los ejes clave en la economía circular.
• La siderurgia europea sigue pendiente del proceso -iniciado en 2016- de reforma de la legislación y el tratamiento a China en los procesos antidumping.
• El sector asegura que un precio competitivo de la energía para la industria afianzará la necesaria reindustrialización del país.

UNESID, Unión de Empresas Siderúrgicas, celebró hoy su 49 Junta General en la que se eligió como nuevo presidente a Bernardo Velázquez, consejero delegado (CEO) de ACERINOX. Velázquez era ya, desde su incorporación al consejo de UNESID en 2010, vicepresidente de la asociación. La secretaria de Estado de Comercio, Marisa Poncela, clausuró el acto.

La Junta repasó el ejercicio 2016, un año atípico desde el punto de vista de la situación política y de los mercados, que se caracterizó por una bajada del consumo de acero, un incremento de las importaciones y un descenso de las exportaciones a terceros países, debido a medidas proteccionistas. Sin embargo, las empresas de UNESID mantuvieron su pulso exportador y mejoraron sus resultados en el último trimestre del año. La producción de acero en España descendió para el conjunto del ejercicio, pero el cambio de tendencia internacional en el segundo semestre hizo que la mayoría de las empresas del sector cerraran año con buenas perspectivas de cara a 2017.

En los primeros meses del presente ejercicio, la construcción privada se está comportando mejor de lo esperado mientras que el sector de automoción ha frenado su crecimiento tras recuperar el nivel de actividad previo a la crisis.

Consumo en ligero descenso e importaciones en aumento

Durante 2016, el consumo de productos siderúrgicos alcanzó 12,6 millones de toneladas, experimentando un ligero descenso del 0,4% sobre el año anterior. Desde el punto de vista de la demanda, la construcción y los bienes de equipo tuvieron un comportamiento débil, especialmente en el segundo semestre.

En cuanto a la oferta de productos, en 2016 las importaciones aumentaron un 5,1% y, por el contrario, las entregas siderúrgicas disminuyeron un 3,1%, quedando en 13,8 millones de toneladas.

Las entregas de productos largos cayeron un 3,9% anual hasta las 8,6 millones de toneladas, mientras que las de productos planos lo hicieron un 1,7% hasta 5,0 millones de toneladas.

El proteccionismo de terceros afecta a nuestras exportaciones

En cuanto a las exportaciones, las destinadas a la Unión Europea subieron un 2,5% en el año, pero las de fuera de la Unión cayeron el 9,1%, arrastrado el total a un descenso del 2,8%, caída que se debe al efecto singular de Argelia, donde bajaron un 26% por las medidas proteccionistas que la Unión Europea debe combatir.

La siderurgia española no es en absoluto proteccionista y está alineada en favor del comercio libre pero leal, de ahí su exigencia al respeto de las reglas en el comercio internacional.

Sin contar Argelia, las exportaciones a países terceros también han crecido un 4% y las totales lo hicieron un 3%.

El sector español del acero es netamente exportador. Las exportaciones suponen el 67% de las entregas, alcanzando el 3% de las exportaciones españolas de bienes. La siderurgia nacional alcanzó un superávit comercial de 853 millones de euros en 2016.

Caída de la producción y mejores perspectivas

La disminución de las entregas estuvo acompañada por otra más intensa de la producción. En 2016 la industria siderúrgica española produjo 13,6 millones de toneladas de acero bruto, lo que ha supuesto un descenso del 8,5% hasta llegar a cifras de 2012.

La disminución de la producción estuvo causada por la debilidad de los mercados, por los  procesos de reforma de instalaciones que tuvieron que detener la fabricación, y por reestructuraciones empresariales.

En relación a las calidades, la producción de acero no aleado mostró el peor comportamiento, descendiendo un 9,6% anual. Del mismo modo, la producción total de otros aceros aleados disminuyó el 5,5%. El acero inoxidable fue la única calidad que aumentó producción, un 2,4% anual.

En todos los casos hubo un importante incremento de actividad en la segunda mitad del año y, en especial, en el último trimestre.

La industria emerge en mejores condiciones

En esta 49 Junta General de UNESID, las empresas asociadas analizaron la actual fase de expansión económica. El PIB español ha crecido tres años consecutivos y mantiene un ritmo de crecimiento superior al esperado.

Las empresas asociadas en UNESID, fuertemente integradas internacionalmente, se benefician también de un crecimiento europeo, que no es brillante pero está consiguiendo esquivar las fuertes incertidumbres de los últimos años. El Brexit y los riesgos que han surgido de los distintos procesos electorales no están materializándose en perjuicios reales.

A la salida de la crisis, el sector siderúrgico español dibuja un nuevo perfil. Tras los grandes esfuerzos realizados por trabajadores y empresas, el compromiso de estas con la sociedad queda demostrado con las nuevas inversiones que estamos viendo en el sector. Son desembolsos que tienen un largo periodo de maduración y que revelan el compromiso empresarial con el futuro.

Ejemplo de sostenibilidad

Como sector comprometido con la sostenibilidad, en el 2016, la industria siderúrgica española ha continuado realizando inversiones en la mejora ambiental de los procesos, impulsadas por el convencimiento de lograr una industria más competitiva y eficiente. El sector confía en que las autoridades públicas impulsen el reconocimiento de este valor en los mercados.

En 2016, en España, en el sector se reciclaron más de 10 millones de toneladas de chatarra, afianzando la industria del acero como la verdadera industria del reciclado y uno de los ejes clave en la economía circular.

La industria siderúrgica continúa manteniendo un empleo de calidad con un 91% de empleos indefinidos frente al 74% de media nacional y el 79% de media industrial.

Digitalización

Además de la inversión en maquinaria, el sector siderúrgico se ha situado en un puesto muy avanzado en cuanto a la digitalización. Gracias a ella se tiene un control muy alto de los procesos y la calidad, así como un elevadísimo volumen de información que sirve de base para futuras innovaciones. Una vez llegado a este nivel el siguiente paso es la integración digital de los fabricantes con los clientes.

Aspectos regulatorios

Con respecto a los aspectos regulatorios y de política comercial, la siderurgia europea sigue pendiente del proceso iniciado el año pasado de reforma de la legislación y el tratamiento a China en los procesos antidumping. Este cambio legislativo ha acabado coincidiendo con un proceso más general de modificación de los instrumentos de defensa comercial de la Unión Europea que son cruciales para el sector.

 

Por otro lado, respecto a la regulación energética, el sector tiene claro que lograr un precio competitivo de la energía para la industria afianzará la necesaria reindustrialización del país.

Reforma estatutaria

A punto de cumplir medio siglo de existencia, UNESID aborda una reforma en profundidad de sus estatutos asociativos para adaptarlos a la realidad jurídica y social del país. En el marco de esta renovación, la Junta aprobó la modificación de la gobernanza de la asociación con la creación de un Comité Ejecutivo compuesto por el presidente y los 6 vicepresidentes: Bernardo Velázquez (ACERINOX), Eric Arana (ARANIA), Jesús Ízcue (ArcelorMittal), Francesc Rubiralta (CELSA), Enrique Freire (MEGASA), José Jainaga (SIDENOR) y Jesús Esmorís (TUBACEX).

Bernardo Velázquez sucede en el cargo a Gonzalo Urquijo, que deja la asociación tras 15 años ininterrumpidos en la presidencia.

Velázquez, nacido en Madrid hace 53 años es ingeniero industrial ICAI. Ocupa además los cargos de vicepresidente del International Stainless Steel Forum (ISSF), presidente del Grupo de Acero Inoxidable de EUROFER (Asociación Europea de Fabricantes de Acero) y consejero de Worldsteel Association (Asociación Mundial de Fabricantes de Acero). Cuenta con una dilatada carrera profesional desde hace 27 años en ACERINOX, donde ha sido director de Planificación Estratégica, director general y, ahora, consejero delegado. En su trayectoria en la compañía ha formado parte de los consejos de administración de North American Stainless (USA), Columbus Stainless (Sudáfrica) y Bahru Stainless (Malasia) donde fue también presidente.