El Concello de Baiona logró reducir en un 40 por ciento el consumo energético tras sustituir cerca de 800 luminarias en todo el municipio.
El proyecto que comenzó en el 2011 se llevó a cabo con presupuestos y recursos íntegramente municipales, sin subvenciones externas. Actualmente se encuentran finalizando los trabajos de sustitución en una de las zonas del municipio y fuentes municipales adelantaron que su prioridad se centrará en los edificios municipales cuya iluminación esté en funcionamiento más de seis horas seguidas al día, tales como el pabellón municipal o la biblioteca.
El municipio actualmente posee 5.000 puntos de luz que suponen un gasto del 70 por ciento del consumo energético mientras que el porcentaje restante corresponde a las instalaciones municipales. El nuevo sistema de iluminación está basado en halogenuro que, frente al sistema de alta presión de sodio, consigue una luz mucho más blanca y optimiza los watios de consumo. El concejal de Vías y Obras Ángel Rodal explicó que éste es el sistema más eficiente para un tipo de luminaria que en algunos casos llega a los 13 metros de altura ya que otros como el basado en tecnología LED no tiene tanta capacidad lumínica, además de que su coste es muy elevado y tardan bastantes minutos en alcanzar el punto óptimo de iluminación. “Por ejemplo el LED lo descartamos para el pabellón porque no podríamos apagar las luces de la pista, actualmente compuesta por 23 focos de 500w cada uno”. Así pues explicó Rodal, con el sistema tradicional una bombilla de 250w tendría un consumo real de 400 con lo que “sólo con las que cambiamos obtenemos un ahorro de 60.000 euros anuales de los 500.000 que se gastan en todo el municipio”.
El responsable de área reiteró la importancia que tiene el proyecto que se está llevando a cabo puesto que desde el 2006 el consumo energético se encareció un 60 por ciento, además de que al obtener una luz más limpia repercute positivamente en la seguridad vial como por ejemplo en zonas de pasos de peatones.